CARACAS.- Los trabajadores de la salud junto a profesores, docentes, jubilados y pensionados tomaron hoy de nuevo las calles en Caracas, para exigirle al presidente venezolano, Nicolás Maduro, que renuncie ante la “incapacidad” de resolver los salarios de “hambre” que los condena a vivir como “indigentes y en la miseria”.
Bajo la consiga “dolarización”, los manifestantes con sus respectivos tapabocas, y pese a la lluvia, recorrieron las adyacencias de la Universidad Central de Venezuela, principal casa de estudios del país.Jubilaciones: los haberes aumentarán un 5% en diciembre
Ana Rosario Contreras, presidenta de Colegio de Enfermeras de Caracas le pidió a Maduro que “renuncie”, ante la pobreza extrema en que mantiene a los venezolanos y el colapso del país.
“Señor Nicolás Maduro, hágale un favor a Venezuela y renuncie, ya usted ha demostrado su incapacidad para liderar este país”, afirmó durante la manifestación.
Destacó que el gremio de enfermería acompaña “cualquier instrumento de lucha que implique un cambio de modelo político porque más de 30 millones de venezolanos no tenemos acceso a la alimentación”.
“Los hospitales siguen en profundo colapso, vemos el manejo político que se le está dando a la pandemia, no se le está diciendo a la población que el virus sigue circulando, que en los hospitales no tenemos capacidad de respuesta y que esto implica que pueda haber un contagio masivo en el país”, alertó.
Destacó que pese a los bajos sueldos que “nos mantienen pasando hambre, no renunciamos en forma masiva porque el compromiso con la democracia y los ciudadanos es más grande”.
A su vez Pablo Zambrano, miembro de la Federación de Trabajadores de la Salud, dijo que rechazan el sistema de remuneración que implementó el régimen, “porque es un sistema que no se le hizo ningún estudio”.
“No puede ser que el equipo económico haya multiplicado por tres y fijarnos un ingreso mensual de 1.200.000 bolívares, (1,7 dólares a tasa oficial). Están de psiquiatría, porque eso es de loco. La realidad económica es otra“, afirmó.
Advirtió que “no descansaremos hasta que comience el regreso del poder adquisitivo”.
“Si no luchamos por el salario no tenemos sangre en las venas, el salario es la protección a la familia”, destacó.
Asimismo, Edgar Machado presidente del sindicato de la Federación Venezolana de Maestros, dijo que seguirán en las calles hasta que el Ejecutivo comprenda la situación que atraviesan los trabajadores.
Machado criticó el aumento unilateral del gobierno que dijo no fue consultado con ninguna de las organizaciones sindicales y “no alcanza ni siquiera para cubrir las necesidades familiares”.
En tanto en la plaza de la Moneda, a escasas cuadras del Palacio de Miraflores, sede del Poder Ejecutivo y lugar de trabajo de Maduro, pensionados y jubilados junto a trabajadores de la administración pública también alzaron su voz por “el hambre y la miseria a las que no está sometiendo el gobierno”.
“Seguimos reclamando el derecho a la alimentación, a los medicamentos, a una pensión digna. Nos están condenando a vivir como indigentes, en la miseria”, afirmó Luis Cano, representante de los jubilados y pensionados.
Asimismo, Miriam Nieto, jubilada del Ministerio de Educación, dijo que las pensiones no alcanzan “ni siquiera para comprar un cartoncito de huevos, menos para los medicamentos”.
“Mis hijos se fueron y yo estoy sola sobreviviendo como puedo porque si compro huevos no puedo comprar queso, y el gobierno no soluciona nada”, fustigó.
Efectivos de los cuerpos de seguridad tomaron la plaza para impedir que la protesta llegara hasta la vicepresidencia de la República. En tanto otros estado replicaron la manifestación.
Los trabajadores reclaman un sueldo base, equivalente a 600 dólares para poder cubrir las necesidades básicas ante la voraz inflación, que hace inalcanzable la Canasta Alimentaria Familiar que durante octubre tuvo un valor de 141.808.837,30 bolívares, el equivalente a unos 283,62 dólares, según el Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros.
Agencia ANSA