Estados Unidos vacuna a toda máquina, tratando de frenar la cabalgada descontrolado y letal de la pandemia de COVID-19, que está dejando más muertos que nunca en el país. Este miércoles se batieron todos los récords, con 3784 fallecidos y 250.000 contagios en un solo día. Estados Unidos ha superado la barrera de los 300.000 fallecidos desde el inicio de la crisis sanitaria.

Esto ocurre mientras el manto blanco del invierno cae sobre estados del noreste, con el miedo de que el mal tiempo dificulte la campaña de vacunación. Las autoridades quieren vacunar a al menos tres millones de personas esta semana, con dosis de Pfizer, y hasta 20 millones en cuanto se apruebe la de Moderna, algo que podría ocurrir en los próximos días.

Una sanitaria sufre una fuerte reacción alérgica a la vacuna de Pfizer

Una sanitaria, vacunada en Alaska, sufrió una fuerte reacción alérgica tras recibir la primera dosis, similar a la experimentada la semana pasada por dos sanitarios británicos. La diferencia es que esta mujer no tenía ningún antecedente de alergia grave.

“__Se encuentra bien -explicó a los medios el doctor Lindy Jones, director del servicio de emergencia del hospital Bartlett-. No precisa ningún medicamento ni oxígeno. Nos limitamos a vigilar su estado. Solo está un poco cansada debido al Benadryl que le dimos”.

Los responsables sanitarios consideran que ha sido un incidente aislado, que no cambiará sus planes ni sus recomendaciones. “No planeamos cambiar el programa de vacunación o la dosis. Esto forma parte de lo que previsto”, aseguró Anne Zink, responsable de Sanidad de Alaska.

Mike Pence se vacunará en público este viernes. Joe Biden, la semana que viene

Ahora llega el turno de los políticos de entrar en escena. La Casa Blanca ha anunciado que el vicepresidente, Mike Pence, se vacunará en público este viernes. La próxima semana lo hará, también en público, el presidente electo, Joe Biden, para dar ejemplo y mostrar que la vacuna es segura.