WASHINGTON.- En el marco de un fuerte recorte a las estimaciones de crecimiento económico de América Latina, que el Fondo Monetario Internacional(FMI) publicó hoy en su informe Perspectivas de la Economía Mundial de 2019, la crisis humanitaria de Venezuela y su “efecto devastador” vuelven a generar alarma luego de un pronóstico de contracción económica más profundo del esperado para este año.

“La profunda crisis humanitaria y la implosión económica en Venezuela continúan teniendo un impacto devastador y se espera que la economía se contraiga en torno al 35% en 2019”, advirtió el organismo en el informe, que no revisó el panorama para 2020. En su informe de abril había pronosticado una contracción de 10 puntos el próximo año.

Venezuela, sumida en una crisis política y humanitaria, sufre una debacle de su economía, que desde este año se agravó por las sanciones norteamericanas y apagones que paralizan el país, como el de anoche, por el que aún hay zonas sin energía.

Las proyecciones para la Argentina y América Latina

Respecto de la economía argentina, el informe dice que “se contrajo en el primer trimestre del año, aunque a un ritmo más lento que en 2018”. Además, dice que la proyección de crecimiento para 2019 “se ha revisado ligeramente a la baja con respecto al informe WEO de abril” y para 2020 “se prevé una recuperación más moderada”. Así, confirma las cifras publicadas en el último staff report del lunes de la semana pasada, donde informaba una caída de 1,3% para este año y una recuperación de 1,1% para 2020 (contra el 2,2% previsto en abril).

Para el resto de la región, las perspectivas del FMI también fueron desalentadoras ante una desaceleración más acentuada prevista en Brasil y México, exacerbada por disputas comerciales globales y un deterioro en la confianza de inversores y analistas.

En el informe, el FMI dijo que ahora prevé que la región en su conjunto se expanda a un ritmo de 0,6% este año, un recorte de 0,8 puntos porcentuales en relación a su último cálculo de abril. Para el 2020, la previsión también fue ajustada ligeramente a la baja, a un 2,3%.

“En América Latina, la actividad se desaceleró notablemente al comienzo del año en varias economías, debido principalmente a factores idiosincrásicos”, indicó la entidad, que hizo un llamado a los gobiernos a regular el gasto fiscal y el endeudamiento.

Las disputas arancelarias y por acuerdos comerciales, junto con un incremento de la deuda y la imposibilidad de sacar adelante reformas macroeconómicas importantes han dañado las perspectivas de Brasil y México, las principales economías latinoamericanas, dijo el FMI.

En Brasil, donde la moral se está evaporando tras rebajas en la calificación de crédito y dudas sobre la viabilidad de la reforma previsional, la economía se expandiría un 0,8% este año, una disminución de 1,3 puntos porcentuales frente a la última estimación de abril. Para 2020, la actividad mejoraría a 2,4%.