Haití se encuentra entre los países líderes que casi han perdido el control de la inflación en su economía. El país llega al tercer lugar muy poco envidiable de las economías de América Latina y el Caribe. Las cifras más astronómicas son registradas por Venezuela, que sigue siendo un país “fuera de competencia” en términos de mayor costo de vida. Pero los gobiernos de Argentina, Haití o Uruguay también han sido duramente criticados por perder el control del costo de la vida.
Haití es uno de los países de la zona de América Latina y el Caribe que registra una tasa de inflación de dos dígitos que alcanza el 13% a fines de 2018. Esto se debe principalmente al aumento de los precios de los combustibles que ha provocado disturbios. y las explosiones de violencia que causaron la muerte de varios ciudadanos en julio de 2018. Esta situación incluso llevó a un cambio de gobierno. Incluso hoy en día, la sombra de estos problemas aún se cierne sobre el país que lucha por distribuir adecuadamente el combustible.
A fines de 2018, los informes de los bancos centrales y las instituciones estadísticas muestran que la inflación es una tarea sobresaliente para muchos países de América Latina y el Caribe. Mientras que Venezuela ha perdido el control de los precios de su economía y Argentina está siguiendo este camino, otros países de la región han logrado resultados excepcionales en el período anterior. Para el Ecuador, los precios apenas aumentaron un 0,7%. En este ranking le siguen El Salvador con 1.4%, Panamá con 2% y Chile con 2.9%.
La inflación no es solo una carga para los más pobres, sino que también es uno de los principales desafíos para los países en desarrollo. Aunque en la mayoría de los países de América Latina los gobiernos se han centrado en los últimos años en controlar el comportamiento de los precios de la canasta de amas de casa, no todos lo han logrado.
Las políticas macroeconómicas del gobierno del presidente Nicolás Maduro han hecho de Venezuela la primera posición deshonrosa en los países con la tasa de inflación más alta del mundo en 2018. Aunque no hay cifras oficiales, la Asamblea Nacional Venezuela, que tiene una mayoría de oposición, calcula, el año pasado, el costo de vida en este país en 1 700 000%. Hoy, estas políticas colocan a Venezuela en la categoría “sobresaliente” en términos de inflación, el nivel exagerado alcanzado por los precios.
Otros países también enfrentan dificultades porque no pueden controlar adecuadamente el aumento de precios de la canasta del ama de casa. Argentina es parte de este grupo. Según cifras oficiales, fue del orden del 47,6% a fines de 2018, bajo la presión de la crisis monetaria que afectó a este país y obligó al gobierno de Mauricio Macri a buscar la asistencia del Fondo Monetario Internacional. (FMI). Este resultado perturbador, que no se ha registrado desde 1991, pone en tela de juicio el objetivo del gobierno de garantizar que, para 2019, la inflación no supere el 23%.
