La economía mundial ante un sombrío panorama. La OCDE ha publicado un informe que muestra el impacto negativo del COVID-19 en el mundo de los negocios. La organización ha recortado drásticamente las perspectivas de crecimiento debido al ‘coronavirus de Wuhan’. La enfermedad se ha propagado desde Asia hasta el corazón de Europa y se ha convertido en una amenaza que perjudica a la economía mundial.

Los diferentes bancos centrales y los gobiernos se preparan ante una posible recesión, como la que se produjo en 2008. Los informes prevén que el crecimiento del PIB mundial caiga hasta el 2,4 % en 2020; el anterior índice era de un 2,9 %. China es el país que más ha sentido el impacto económico de la enfermedad. Su previsión de crecimiento se ha reducido al 4,9 %, en lugar del 5,7 % inicial. Las medidas sanitarias adoptadas han interrumpido el suministro y las cadenas de producción y han provocado grandes pérdidas en los sectores manufactureros y en el comercio.