Hace 55 años, China realizó el ensayo de su primera bomba atómica. Hoy cuenta con más de 290 armas de este tipo y con el tercer arsenal nuclear en el mundo después de Rusia y EEUU.
En parte, China obtuvo su primera bomba nuclear gracias a la ayuda de la URSS. Casi 10.000 expertos soviéticos en la industria atómica visitaron China entre 1950 y 1960. En los años siguientes Moscú decidió interrumpir su programa de ayuda a causa del deterioro de las relaciones bilaterales, tras lo cual Pekín logró crear su primera bomba atómica por sí sola.
Un año después del primer ensayo en tierra firme, los aviones chinos probaron arrojar la primera desde el aire. En junio de 1967 el país asiático hizo explotar una bomba de hidrógeno con potencia de 3,3 megatones. A día de hoy Pekín cuenta con una tríada nuclear, es decir, sus armas de destrucción masiva pueden portarse con ayuda de medios terrestres, aéreos y navales, destaca el periodista Andréi Kots en su artículo para la versión rusa Sputnik.
El 2 de mayo el Pentágono publicó un reporte sobre el potencial estratégico de los proyectos de desarrollo militares chinos. Según sus cálculos, el gigante asiático dispone en su arsenal de casi 90 misiles balísticos intercontinentales, entre los cuales están los conocidos Dong Feng 41 (DF-41). Este proyectil fue mostrado al público por primera vez en Pekín durante el desfile militar del 1 de octubre.
El DF-41 es una de las armas más modernas de China. Es capaz de portar entre 10 y 12 ojivas nucleares a una distancia de casi 14.000 kilómetros. En otras palabras, su alcance puede llegar hasta el territorio continental de EEUU.
Portadores navales y aéreos
El componente naval de las fuerzas de disuasión nuclear de China incluye cuatro submarinos tipo 094. Cada uno de estos monstruos es capaz de portar hasta 12 misiles balísticos Julang-2, cuyo alcance va desde los 8.000 a los 9.000 kilómetros.
Actualmente China está desarrollando los sumergibles de nueva generación tipo 096 y planea lanzar su producción en los años 2020. Para armarlos el país asiático baraja crear una nueva familia de misiles balísticos Julang-3. El alcance de estos proyectiles podría ser de hasta 12.000 kilómetros.
En septiembre de 2016 Pekín confirmó oficialmente el desarrollo del bombardero estratégico Xian H-20, de nueva generación. Se espera que este avión subsónico se ensamble —en concordancia con su diseño— de forma parecida a como lo hace el bombardero estadounidense B-2. El alcance de vuelo de esta aeronave rondará los 8.000 kilómetros, y su carga útil será de 10 toneladas. El Xian H-20 debería sustituir la flota de antiguos bombarderos H-6.
Además, varios expertos consideran que la última versión del bombardero H-6K, puesto en servicio en 2011, también puede portar armas de destrucción masiva. Con una carga útil de hasta 12 toneladas, esta ave de acero aloja en su interior los misiles de crucero CJ-10K, capaces de portar ojivas nucleares y de desarrollar una velocidad de hasta 1.000 km/h, subrayó Kots.
Arsenal de corto y medio alcance
Además, China dispone de un arsenal impresionante de proyectiles balísticos de corto y medio alcance. Sus misiles Dongfeng —el gigante asiático posee casi 80 unidades— son capaces de transportar una ojiva nuclear a una distancia de entre 3.000 y 5.500 kilómetros. Los misiles equipados con cabezas convencionales sirven para aniquilar grandes buques. Esta es la razón por la que los medios de comunicación mainstream los bautizaron como asesinos de portaviones.Distintos expertos consideran que el imponente número de misiles de medio y pequeño alcance por parte de China fue una de las causas que empujaron a EEUU a salir del Tratado INF, firmado el 8 de diciembre del 1987 por Moscú y Washington.
Ahora, China sigue modernizando paulatinamente su arsenal. En el desfile militar del 1 de octubre, Pekín presentó su misil balístico de alcance medio DF-17. En cuanto a su designación, este proyectil se parece al Avangard ruso. Es capaz de maniobrar fácilmente en el aire, lo que dificulta que los sistemas de defensa antimisiles lo intercepten.