El banco central de China ha advertido a la comunidad internacional sobre el riesgo de una nueva ‘Gran Depresión’ a causa de la pandemia de covid-19, aunque señaló que esa probabilidad todavía es baja.
“No se debe excluir la posibilidad de una ‘Gran Depresión’ si la epidemia sigue fuera de control, y el deterioro de la economía real se ve agravada con la aparición de riesgos financieros“, afirmó Zhu Jun, directora del departamento internacional del Banco Popular de China, informa South China Morning Post.
La difícil elección entre la necesidad de proteger la salud pública y el costo económico del cierre de casi cualquier actividad humana que implique un contacto cercano, ha llevado a que muchos economistas pasen a advertir de que el impacto económico del covid-19 podría ser más grave que el de la crisis financiera global de 2008 o incluso la Gran Depresión.
Esta última, que empezó con un desplome en Wall Street en 1929, conllevó la congelación de los mercados crediticios, quiebras, la caída del PIB estadounidense de más del 10 % y un nivel de desempleo de un 25 %.
Ya existen indicios de que la crisis actual está pasando factura al mercado laboral en EE.UU. Las solicitudes iniciales de subsidios por desempleo llegaron a 6,65 millones la semana pasada, un aumento de más de tres millones respecto a los 3,3 millones peticiones de la semana previa.
Los mercados globales han caído un 35 % y los crediticios se han contraído hasta los niveles de 2008.
Los gigantes financieros Goldman Sachs, JP Morgan y Morgan Stanley pronostican que el PIB de EE.UU. caerá la tasa anualizada un 6 % en el primer trimestre y entre un 24 y 30 % en el segundo.
Moody’s ha informado que el 30 % de los préstamos hipotecarios dejarán de ser abonados como resultado de despedidos y la falta de apoyo a negocios pequeños.
Según Zhu, la incertidumbre del mercado se debe a que las medidas rápidas y contundentes de los bancos centrales no lograron ayudar directamente a controlar la epidemia, mientras que detener su propagación ayudaría a ganar la confianza de los mercados.
Las políticas de las economías avanzadas han ayudado a estabilizar la confianza en el mercado de valores, pero riesgos ocultos siguen existiendo en el sistema financiero global, precisó.
Si el mercado entra en pánico debido al cada vez más intenso impacto de la epidemia, eso podría restringir la liquidez, lo que desencadenaría un contagio en diferentes clases de activos.