Un grupo de investigadores acaban de presentar sus asombrosos descubrimientos sobre la ciudad de Angamuco, construida hace más de mil años por los purépecha, un grupo indígena enfrentado a los aztecas.

Gracias a una técnica de mapeo a láser, los científicos revelaron que esta antigua urbe que se extendía a lo largo de 26 kilómetros cuadrados poseía unos 40 mil edificios, es decir, aproximadamente el equivalente a los que existen en la actualidad en la isla de Manhattan.

“Pensar que esta masiva ciudad existió en el corazón de México durante todo este tiempo y nadie supo que era una maravilla de estas dimensiones”, dijo Chris Fisher, un arqueólogo de la Universidad del Estado de Colorado, quien estuvo a cargo de presentar las últimas revelaciones del estudio.

Mucho menos conocidos que los Aztecas, los purépecha fueron una importante civilización del centro de México hasta comienzos del siglo XVI, antes de que los europeos llegaran y causaran estragos a través de las guerras y las enfermedades.

“Esa es un área enorme con mucha gente y una gran cantidad de edificios”, dijo Fisher.

El equipo también descubrió que Angamuco tiene un diseño inusual. Los monumentos como pirámides y plazas abiertas se concentran en gran medida en ocho zonas alrededor de los bordes de la ciudad, en lugar de estar ubicados en el centro, como la mayoría de las urbes tradicionales.

Según Fisher, más de 100.000 personas vivieron en Angamuco en su apogeo entre aproximadamente los años 1000 y 1350. “(Su tamaño) la convertiría en la ciudad más grande que conocemos hasta ahora en el occidente de México durante este período”, dijo el investigador.

Lidar, una revolución para la arqueología

En efecto, la arqueología podría estar siendo redefinida gracias a esta avanzada técnica de mapeo a láser, que consiste en dirigir una sucesión rápida de pulsos láser en el suelo desde un avión.

La técnica, conocida como detección de luz y escaneo de alcance (Lidar, por sus siglas en inglés), produce un mapa preciso y tridimensional del paisaje incluso allí donde la vegetación es densa.

A principios del mes de febrero, los investigadores revelaron que dicha técnica se había utilizado para una antigua ciudad maya escondida en la frondosa selva de Guatemala, además de que les había servido para mapear la ciudad de Caracol -otra famosa metrópoli maya-.