La Policía francesa se enfrenta a un arma no convencional durante las protestas de los ‘chalecos amarillos’: bolsas de materia fecal lanzadas por los manifestantes.
Durante las últimas protestas del pasado sábado, oficiales de la Policía criminal (BAC) de la ciudad de Marsella fueron atacados y manchados con excrementos. Según algunas informaciones, uno de los agentes sufrió daños en el codo.
El líder de un sindicato de la Policía local, Rudy Manna, reveló los detalles del desagradable episodio al periódico La Provence.
“[Los agentes] lo tenían en su cabello, en sus zapatos, tenían que deshacerse de sus ropas. Me han dicho que nunca han sido tan humillados“, aseveró Manna. “Y como era realmente tarde, las duchas no funcionaban en la Estación del Norte, tenían que limpiarse con agua fría en el garaje”.
Los responsables aún no han sido identificados, ya que se escondieron entre otros manifestantes, agregó el líder sindical. Incidentes similares tuvieron lugar en la ciudad sureña de Montpellier, según representantes de los sindicatos policiales.
Según la Policía, antes de las manifestaciones del sábado aparecieron en las redes sociales llamamientos para que los manifestantes se armaran con estos ‘proyectiles’ denominados ‘cacatov’ (en referencia a cócteles molotov, pero llenos de materia fecal en lugar de gasolina).