Organizaciones del municipio de Baní, la gobernación de la provincia Peravia y la oficina senatorial se movilizaron contra la delincuencia, el narcotráfico y la impunidad que, según denuncian, ha tomado las calles de la demarcación.
De acuerdo al senador Wilton Guerrero, la delincuencia en Baní ha disminuido luego de que fuera cambiada la dotación policial del municipio. Sin embargo, el legislador consideró que la criminalidad y el narcotráfico continuarán trazando las pautas en los pueblos de todo el país, mientras las autoridades continúen trasladando a “los delincuentes uniformados” a otras provincias.
“Cuando un delincuente uniformado comete un crimen no se toman sanciones, se le manda a otro pueblo. Si comete en Baní un acto de apoyo a la delincuencia, lo manda para Azua. Los que estaban a aquí, que los sacamos, los mandaron para otros pueblos a que sigan haciendo lo mismo” sostuvo el senador.
Guerrero indicó además que la razón por la que se producen estas acciones de impunidad es “porque miembros de los altos mandos de la Policía Nacional y de la DNCD quieren continuar recibiendo los peajes que les manda los agentes vinculados al narcotráfico y la criminalidad”.
Algunos moradores del municipio opinan que la delincuencia y el microtráfico no han mermado, debido a que se siguen produciendo la misma cantidad de atracos que antes. “La semana pasada dos tipos le quitaron cuatro celulares a igual número de muchachas frente a mi casa.”, expresó Yubelkis Beltré, moradora del sector los Ciruelitos de Baní. Emilkis Bautista, residente en el centro de Baní, estimó que las drogas continúan en las calles, pese a que el senador manifestó que más de 100 puntos de ventas de drogas que había en la ciudad ya fueron desarticulados.