Al menos cinco personas han muerto en dos tiroteos que han ocurrido este lunes en los estados de Chicago y Denver. En el primero han fallecido cuatro personas, entre ellos el presunto atacante, mientras que en el segundo ha muerto una persona y otras cuatro han resultado heridas.
El tiroteo en Chicago, que ha tenido lugar en el hospital Mercy, ha dejado dos mujeres, un policía y el presunto atacante muertos, según ha informado en rueda de prensa el superintendente de la Policía de Chicago, Eddie T. Johnson.
El suceso empezó con una discusión entre el atacante y su pareja sentimental en el aparcamiento del hospital sobre las 15.30 hora local (22.30 horas española) y luego se trasladó al interior del edificio, donde ocurrió un enfrentamiento con policías.
El presunto atacante mató primero a su pareja en el aparcamiento, y ya en el interior del hospital acabó con la vida de una mujer que salía de un ascensor y del policía. Aún no está claro si el sujeto se suicidó o murió por disparos de los agentes.
Las dos mujeres muertas eran trabajadoras del Hospital Mercy de Chicago, en el estado de Illinois.
“Durante el intercambio de disparos en el hospital, otra mujer, trabajadora del centro, resultó impactada de bala, mortalmente. Durante ese intercambio uno de nuestros agentes también resultó herido mortalmente por el atacante”, ha dicho Johnson.
La discusión en el aparcamiento ha podido originarse por un “noviazgo roto”, según han indicado fuentes al rotativo local The Chicago Tribune.
La Policía ha identificado al agente muerto como Samuel Jiménez, de 28 años, mientras que medios han informado de que la mujer asesinada en el aparcamiento era doctora del servicio de emergencias y la otra era auxiliar de farmacia.
Un muerto en el tiroteo en Denver
En Denver, un tiroteo ha dejado una persona muerta y otras cuatro heridas. Al menos un sospechoso ha permanecido en libertad después del tiroteo en una esquina del centro de la calle, mientras que la policía ha dicho que él creía que las lesiones “no amenazaban la vida”.
