La aprobación de los presupuestos de Guatemala con nocturnidad y de manera poco ortodoxa -en la madrugada y sin que todos los diputados estuvieran presentes- ha inflamado las calles del país.
Del fuego metafórico de las calles, que cristalizó este sábado en una protesta multitudinaria en la capital, al fuego literal en el edificio del Congreso, en el que ardieron varias oficinas hasta que los exaltados fueron desalojados por fuerzas de seguridad y cuerpos de bomberos, que apagaron el incendio.
Los manifestantes, en su mayoría encapuchados, rompieron la puerta de ingreso al Parlamento y también las ventanas, lanzando antorchas de fuego al interior y avanzando para destruir las instalaciones. Durante unos 10 minutos fueron capaces de infligir muchos daños en el edificio.
Muchos de ellos se llevaron inmobiliario del lugar e incluso algunos enseñaron bebidas alcohólicas que eran guardadas dentro del hemiciclo.
Los diputados no se encontraban en el hemiciclo y por el momento no se han divulgado datos sobre heridos o fallecidos dentro del Congreso, ubicado en el centro de la Ciudad de Guatemala.
Artistas, colectivos y docenas de entidades habían convocado esta marcha de rechazo al presupuesto de ingresos y egresos del Estado para 2021, aprobado por el Parlamento, en su mayoría oficialista, y presentado por el Gobierno de Alejandro Giammattei.SPONSORED CONTENTDelivering solar power to the most remote places on earthTotal Access To Energy Solutions (TATES) is at the forefront of the campaign to deliver solar power to some of the most remote places on earthAd by Total
Una segunda marcha transcurrió sin incidentes
En paralelo, mientras cientos de manifestantes tomaban el Congreso, otros miles de guatemaltecos se manifestaban pacíficamente contra Giammattei a solo un kilómetro de distancia frente al Palacio Nacional de la Cultura (sede del Gobierno).
El presidente guatemalteco reaccionó a las manifestaciones mediante un mensaje en sus redes sociales, en el que indicó que “se tiene el derecho de manifestar conforme la ley” pero “tampoco podremos permitir que se vandalice con la propiedad pública o privada”.