Bakú ha lanzando una contraofensiva contra Armenia tras asegurar que habían registrado ataques contra sus posiciones militares y civiles.

Según el Ministerio de Defensa de Azerbaiyán, Armenia violó el alto el fuego (de 1994) y lanzó a primera hora del domingo “provocaciones a gran escala” con bombardeos intensivos contra las posiciones del Ejército azerbaiyano a lo largo de todo el frente y contra asentamientos en primera línea de la zona de conflicto.

Según la versión de Azerbaiyán, Armenia empleó en el ataque armas de gran calibre, morteros y artillería, y como resultado del bombardeo se han producido “muertos y heridos entre la población civil”, además de “graves daños en la infraestructura civil”.

Mientras, Azerbaiyán asegura haber destruido 12 sistemas antimisiles aéreos. Armenia apunta que ha acabado con dos helicópteros, tres tanques y tres drones.

Ereván defiende que la ofensiva de Azerbaiyán ya estaba planificada, ha decretado la movilización general y la Ley Marcial, por medio del cual se otorgan facultades extraordinarias a las fuerzas armadas en casos de guerra.