Nueva York reabre al fin sus museos. Tras prácticamente seis meses cerrados a causa de la pandemia del coronavirus, museos como el MoMA o el Metropolitan vuelven a acoger desde ya a unos visitantes deseosos de poder volver a disfrutar de sus muchas obras maestras. La espera se ha hecho muy larga:

“He podido ver de dos de mis artistas favoritos, Picasso y Georges Seurat”, dice una joven acompañada de su madre, que asegura que “tan pronto como me enteré de que iban a abrir me metí en internet, saqué mis entradas y dije, vamos. Fue una buena experiencia”.

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Por supuesto, muchas cosas han cambiado. Los visitantes deben reservar ahora sus entradas online, y solo se aceptan 100 personas por hora. A la entrada se les toma la temperatura y a lo largo de toda la visita habrá que mantener el distanciamiento social.

Han sido meses ciertamente duros para estos museos. Se calcula que el Met habría perdido cerca de 125 millones de euros a causa del cierre obligado, lo que ha acarreado consigo la reducción de su plantilla en un 20%. La falta de turismo en los próximo años también será un factor determinante en el lento y costoso renacer de estos museos. El arte de su interior, afortunadamente, sigue siendo el mismo. Toca volver a disfrutarlo.