“Un éxito mayor de lo esperado”: los cuatro primeros niños tailandeses salen de la cueva
Se despejó la incógnita. El plan, al menos en su primera etapa, ha funcionado. Han hecho falta decenas de buceadores, un enorme esfuerzo de cooperación internacional y una lucha denodada contra el tiempo y el agua. Pero el alivio es inmenso. Ya están fuera cuatro de los “jabalíes salvajes”, los doce niños y el entrenador atrapados en la cueva tailandesa de Tham Luang. El rescate de los nueve restantes se reanudará este lunes. Han pasado 16 días desde que se dio la voz de alarma sobre la desaparición de los “jabalíes salvajes”, los doce jugadores de un equipo de fútbol entre los 11 y los 16 años y su entrenador adjunto, de 25 años. Dos semanas en las que reinó la incertidumbre, primero sobre su paradero y después sobre cómo se les sacaría. Todos los métodos posibles tenían riesgos. Finalmente, ante la llegada de nuevas lluvias que puedan inundar de nuevo la cueva, se optó por el más rápido, el de sacarles buceando tras haber drenado lo más posible el interior de la cueva inundada. Con el corazón en un puño: dos días antes, la muerte de uno de los buzos voluntarios había puesto de manifiesto la dificultad de la empresa.