Más de 30 ultras detenidos en Lublin, localidad del este de Polonia, por intentar reventar la Marcha del Orgullo Gay. La policía cargó con cañones de agua para dispersar a los radicales.
La marcha había sido prohibida por el ayuntamiento alegando razones de seguridad, aunque las organizaciones LGTBI recurrieron la decisión ante la Justicia, que a última hora permitió el acto.
Finalmente la gay pride pudo recorrer las calles de la localidad entre un fuerte dispositivo de seguridad, mientras grupos ultra intentaban romper el cordón policial.
Lublin, con cerca de 350.000 habitantes es la novena ciudad del país, es una de las capitales de provincia más conservadoras de Polonia, donde la Iglesia católica cuenta con una presencia importante.
En Polonia, donde el próximo 13 de octubre se celebran elecciones generales, los derechos LGTBI se han convertido en tema recurrente de la campaña electoral.
Desde el partido gobernante, el nacionalista y conservador Ley y Justicia, se critica abiertamente a los movimientos LGTBI. Desde las organizaciones LGTBI de Polonia se ha venido denunciando reiteradamente un rebrote de la homofobia en este país coincidiendo con la cercanía de las elecciones.
