El Ártico está en una situación crítica. La temporada de deshielo de 2019 ha sido la más intensa desde el récord de 2012. El estudio de visualizaciones científicas de la NASA ha actualizado su animación que muestra no sólo cómo el hielo marino del Ártico tiene cada vez menos superficie; también es cada vez más fino, lo que dificulta su recuperación.
Para mostrarlo, el vídeo representa en blanco el hielo más antiguo, con más de cuatro años. En gris, el hielo formado en el mismo año. El resultado es inquietante. La visualización abarca desde enero de 1984 hasta septiembre de 2019, cuando se ha alcanzado el mínimo anual.
Septiembre es el momento en el que cada año se alcanza el mínimo de hielo marino, después comienza a recuperarse. Pues bien, en septiembre de 1984 el hielo de más de cuatro años de antigüedad cubría unos 2,7 millones de kilómetros cuadrados.