Si nos fijamos en deportes acuáticos de alto voltraje, el Seabreacher sumergible y el Flyboard propulsado a chorro están entre los primeros.

El primero de ellos está diseñado para parecerse y moverse como un Tiburón o como un delfín, según las versiones. Puede viajar a una velocidad de hasta 95 km por hora, hacer giros de 360 ​​grados y sumergirse bajo el agua. Funciona como un avión e incluso está hecho de algunos de los mismos materiales que un avión de combate. Trescientos caballos lo empujan.

Lo hemos probado y disfrutado en la playa de Jumeirah, en Dubai. Tienen el resultado en este vídeo.