NOTICIA

TAMAÑO DE TEXTOAaAa

Italia ha sido siempre uno de los destinos favoritos de los turistas estadounidenses, rusos o brasileños durante las vacaciones de verano, pero hoy por hoy está casi irreconocible por estas fechas. La isla de Capri, prácticamente vacía de visitantes, es un claro y siginificativo ejemplo.

“La taquilla del ferri estaba siempre abarrotada por turistas, todos ellos extranjeros. Hoy solo se ven uno o dos al día”, nos cuenta Ciro Accordo, de la línea de ferris Caremar.

Ferris a media capacidad

Durante nuestro trayecto en ferri a la isla napolitana comprobamos que, en efecto, hay muchos asientos por ocupar. En esta época del año el ferri que conecta Nápoles con Capri suele estar lleno de turistas. La capacidad del barco es de unos 600 pasajeros y actualmente, sobre todo entre semana, la media es de 300 pasajeros.

Ya en tierra, salta a la vista que las cosas han cambiado mucho en cuestión de pocos meses en la famosa isla, como nos confirma el propietario de un quiosco: “Normalmente hay dos personas en el mostrador, pero ahora estoy yo solo. Solo hay un puñado de personas”.

Brasileños, estadounidenses y rusos formaban el conocido en Capri como “grupo de los grandes gastadores”. Todos ellos generaban en la isla cuantiosos ingresos especialmente en el sector del lujo.

Según Luciano Bersani, presidente de ASCOM, “el impacto en la economía local asciende al 70 por ciento de los ingresos totales. Hablamos de un tipo de clientela que no se puede reemplazar fácilmente. Actualmente contamos con una clientela fundamentalmente italiana y unos pocos europeos”.

Pocos turistas, pero contentos

Los viajes en grupo han desaparecido y la mayoría de los turistas son italianos o alemanes. A ellos, obviamente, no parece importarles especialmente este escenario tan particular: “Yo como turista estoy encantada”, reconoce una joven alemana. “Que esté todo tan vacío, poder disfrutar de la vistas… Pero obviamente lo lamento por las tiendas y los restaurantes”.

La actual situación es comprensible en plena crisis del coronavirus. Pero está por ver que sucederá en un futuro próximo. El presidente de la Organización Nacional de Hoteles de Italia, Bernabó Bocca, se muestra positivo pese a todo:

“Parece que el virus ha golpeado a los países más ricos, que son los más importantes para nosotros. Pero yo soy muy optimista, y creo que una vez que se encuentre la vacuna adecuada colveremos a la normalidad. De hecho, aquellos que no pudieron venir a Italia en 2020 debido al virus volverán en 2021″.

A la espera de la ansiada vacuna, la “dolce vita” en la bella Capri tendrá que esperar.