El caos se apoderó de Washington este miércoles cuando el Congreso se disponía a confirmar al demócrata Joe Biden como próximo presidente de Estados Unidos. Miles de seguidores de Donald Trump, azuzados por sus acusaciones infundadas de fraude electoral, rodearon el Capitolio y traspasaron de forma violenta los cordones policiales, provocando altercados dentro del edificio. Lo que se vio entonces no se recuerda en la historia reciente del país: la sesión tuvo que ser suspendida, la ciudad decretó toque de queda, la Guardia Nacional fue desplegada y el mundo vio una imagen inaudita de Estados Unidos.