Al menos 19 niños y dos maestras murieron este martes en una escuela en la localidad de Uvalde, en el estado de Texas, después de que un joven de 18 años entrara armado y comenzara a disparar.
El individuo fue identificado como Salvador Ramos, ciudadano estadounidense y residente en este pueblo de 15.000 habitantes ubicado a unos 135 kilómetros de San Antonio.
El gobernador de Texas, Greg Abbot, declaró que Ramos murió aparentemente tras enfrentarse a la policía en la escuela. Dos de los agentes fueron alcanzados por balas, pero Abbot aseguró que se encuentran en estado estable.
Las víctimas eran alumnos de 2°, 3° y 4° grado con edades comprendidas entre 7 y 10 años. Dos profesoras también murieron en el tiroteo en esta escuela de unos 500 alumnos, la mayoría de origen latinoamericano.
Aún no está claro el motivo del crimen, pero la policía reporta que todo parece indicar que Ramos actuó solo.
El joven conducía una camioneta que chocó contra una zanja a pocos metros de la Robb Elementary School, donde entró y comenzó a disparar en un aula.
Un agente de la Patrulla Fronteriza de EE.UU. que estaba cerca cuando comenzó el tiroteo ingresó a la escuela y disparó y mató al hombre armado, que estaba detrás de una barricada, reportó la agencia de noticias Associated Press.
Dos rifles por su 18 cumpleaños
El asaltante, vestido con un chaleco antibalas, salió del vehículo accidentado portando un rifle que luego disparó a fuego abierto contra el edificio, según dijo a la cadena CNN el sargento Erick Estrada, del Departamento de Seguridad Pública de Texas.
Los investigadores dicen que el sujeto estaba armado con una pistola de mano, un rifle semiautomático AR-15 y cargadores de alta capacidad.
El atacante había cumplido los 18 recientemente y no tenía antecedentes penales, confirmaron las autoridades.
Ramos compró dos rifles AR y 375 rondas de municiones pocos días después de su 18 cumpleaños, según un informe enviado por la policía estatal al senador Whitmire.
Uno de los rifles se encontró en la escena del crimen, junto con siete cargadores de 30 rondas cada uno, y el otro en su coche accidentado fuera de la escuela, según los informes.
Un joven tímido al que hacían bullying
Medios estadounidenses han ido revelando detalles sobre la vida y la personalidad del atacante, definido por algunos de sus compañeros como un joven solitario que sufría acoso escolar.
Un estudiante que había sido amigo de Ramos en octavo grado explicó al Washington Post que era un adolescente tímido al que sus compañeros sometían a un constante acoso porque tartamudeaba y ceceaba, entre otros motivos.
Relató que el joven, con el que solía jugar a videojuegos como Fortnite y Call of Duty, mostró cambios extraños en su personalidad y comenzó a tener comportamientos inusuales, como hacerse cortes en la cara.
También aseguró que el que fue su amigo comenzó a vestir completamente de negro y con botas militares y a ausentarse de la escuela por largas temporadas, por lo que no parecía que fuera a graduarse.
Por su parte, un vecino de Ramos de 41 años declaró a la cadena CBS, socio estadounidense de BBC, que Ramos “tuvo una vida difícil” y que su madre era adicta a las drogas y “nunca mostró amor” por él.
También advirtió que desde los 14 o 15 años su comportamiento había cambiado, era difícil mantener una conversación con él y parecía haberse convertido en “un marginado en la escuela”
Según testimonios, el joven tenía contacto en redes sociales con personas que había conocido online.
A una joven a la que no conocía personalmente la etiquetó en una publicación de Instagram con una fotografía de los dos rifles antes de perpetrar el ataque.
Su abuela
Antes de salir de casa, el sujeto también habría disparado a su abuela, que fue traslada al hospital en estado crítico.
Abbot indicó que Ramos era residente de Uvalde y estudiaba en una secundaria cercana.
El atacante tenía como su dirección oficial el domicilio de su abuela, según los documentos recibidos por la Oficina Federal de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos.
Según el gobernador Abbott, el Ramos hizo tres publicaciones en su perfil de Facebook antes del tiroteo.
En la primera, unos 30 minutos antes, escribió: “Le voy a disparar a mi abuela”.
En la segunda publicación confirmó que lo había hecho.
En la tercera publicación, unos 15 minutos antes de que comenzara su ataque en la escuela, anunció que iba a disparar contra una escuela primaria.