LIMA.— Otrora maquinaria de oro en el béisbol de los Juegos Panamericanos, Cuba se despidió del deporte de sus amores en Lima más cerca del sótano que del podio.
La selección cubana quedó tendida en el terreno el sábado en innings extra, al caer por 10-9 ante República Dominicana en el juego por el quinto y sexto lugar, entre ocho que participaron en el torneo.
Cuba quedó así sólo encima de Argentina y el anfitrión Perú. En un partido de locos, los cubanos habían tomado ventaja de 9-1 con un racimo de ocho carreras en la parte alta del décimo episodio, pero Dominicana reaccionó increíblemente en el cierre empatando la pizarra y produciendo la carrera de la victoria.
La selección dominicana terminó con 14 imparables contra nueve de Cuba.
El antesalista dominicano Diego Goris lideró la ofensiva con dos anotadas y tres impulsadas. Huascar Brazoban, uno de los seis lanzadores utilizados por los quisqueyanos, se acreditó la victoria.
El perdedor fue Frank Medina. Cuba llegó a Lima por el oro en su deporte rey con su mejor escuadra, según expertos y medios en la isla. Un equipo en el que sólo faltó el veterano y cuarto bate Alfredo Despaigne, pero que contaba con ocho peloteros que militan en las ligas de Japón, México y Canadá.
Sin embargo, perdió sus dos primeros partidos en su zona frente a Colombia 6-1 y Canadá 8-6, para luego aplastar a Argentina 10-0. Cuba, una potencia mundial y olímpica, sumó diez oros seguidos entre los Panamericanos de Cali de 1971 y los de Río de Janeiro 2007. Vio terminada esa racha en las dos siguientes justas de Guadalajara 2011 y Toronto 2015, en que acabó apenas con el bronce.
Canadá ganó esas dos ediciones y Estados Unidos se quedó con la plata. En los últimos años, el béisbol cubano ha sumado tropiezos en grandes torneos. Si bien ganó las medallas de oro olímpicas en Barcelona 1992 y Atlanta 1996, cedió el cetro en Sydney 2000.
Lo recuperó en Atenas en 2004, pero falló en repetirlo en Beijing 2008. El béisbol dejó de disputarse luego en Londres 2012 y Río de Janeiro 2016, aunque regresará a Tokio 2020. Mientras tanto, en los cuatro clásicos mundiales organizados por las Grandes Ligas, los cubanos solo lograron un segundo lugar en la primera edición de 2006, que ganó Japón.