Desde que el presidente Luis Abinader puso en marcha la cruzada contra la delincuencia, integrando a los militares como fuerza de auxilio a la policía, la espera de resultados concretos marca las expectativas de los ciudadanos.
Ayer, la policía mató a balazos a un presunto delincuente, solo identificado por el alias “Nanito”, durante una intervención en el barrio La Puya, de Arroyo Hondo.
Era un alegado delincuente, miembro de una banda peligrosa que tenía en zozobra el área, según reveló una fuente a periodistas de Listín Diario.
Mientras un equipo de policías supervisaba la zona de La Arenita, en La Puya, de Arroyo Hondo, “Nanito” inició la huida, al ser identificado, y luego penetró a una casa, a resguardarse.
Al verse atrapado, según la fuente, atacó a la policía, hiriendo en la mano izquierda a un raso.
En redes sociales circula un audiovisual en el que se observan oficiales y ciudadanos caminar sobre techos de las casas del sector, armas en manos, en busca de “Nanito”.
Cuando el cadáver era sacado envuelto en una sábana, ensangrentada, se vio llorar a residentes de la zona.
Desde los días viernes y la madrugada del sábado, cuando empezó el patrullaje, han ocurrido seis muertes y ocho heridos en diferentes puntos del país.
El viernes, dos personas fueron muertas y una herida de gravedad, luego de que encapuchados atacaran a tiros el vehículo donde estos viajaban, en la carretera Mella, en Santo Domingo Este.
Otro caso ocurrió horas después en la autopista Las Américas, donde desconocidos a bordo de dos vehículos mataron a balazos a un italiano mientras conducía su vehículo.
A esos casos se suman el de la muerte de un joven durante un frustrado atraco a una joyería de la avenida Independencia.
La madrugada del sábado, en San Francisco de Macorís, ocho personas fueron heridas de bala tras una emboscada a una familia.
Hasta ayer, la Policía no tenía respuesta a ninguno de estos casos, limitándose a decir que “continúan las investigaciones y los levantamientos de lugar para identificar a los responsables”.
Los operativos policiaco-militares siguen su curso, mientras ayer un reporte detalla que en Santiago, La Vega, Moca, Valverde, Montecristi, Santiago Rodríguez y Dajabón fueron apresadas 300 personas, de entre 598 depuradas. Hubo retención de 297 motocicletas.
Antecedentes, apoyo
Un día después de iniciado el extenso despliegue policíaco-militar en barrios de la capital, para contener el torrente de delincuencia que ha extendido su empuje impetuoso hacia otras zonas, los vecindarios han valorado los operativos vía terrestre y área, por lo que juzgan oportuno darle a esto carácter permanente.
Ayer, domingo, un recorrido por calles de los barrios Capotillo, 24 de abril, Luperón y Simón Bolívar permitido observar el desarrollo de estas labores de seguridad ciudadana.
Residentes en esos sectores insisten en que no debe ser patrullaje de un día, sino permanente. “Sí, andaban volando en helicóptero y eso, pero deben hacerlo siempre. Así es que la Policía tiene que trabajar, pero un solo día no, el patrullaje debe ser constante, pero vienen hoy y duran un mes para volver”, dijo un vecino de Capotillo, que prefirió no identificarse, por temor a represalias.
“Hay que darle seguimiento, porque el seguimiento lo que da son buenos resultados”, agregó.
Daniel Sánchez, comerciante, cree que para disminuir los la delincuencia “es necesario que la vigilancia policial sea permanente debido a que en cualquier momento puede ocurrir un asalto”.
Más problemas
Ronda de quejas
En el sector Barrio Nuevo, de Sabana Perdida, se quejan de una continua ola de atracos que intranquiliza a sus residentes.
Mientras, en el sector Los Multi, de Los Guaricanos, hay mucho temor porque los grupos delictivos siguen “haciendo de las suyas” en horas de la noche.
“No podemos salir a la calle de noche porque los atracadores te dejan sin nada”, dijo Michael Martínez, un vecino de Barrio Nuevo.