Rusia rompió este jueves, por tercer día consecutivo, su récord de muertes de coronavirus con un total de 1.195 fallecidos en las últimas 24 horas, mientras que Alemania registró su número más elevado de contagios, con 33.949 infectados en la jornada pasada.
En el mes de noviembre, el país presidido por Vladimir Putin suma tres récords de víctimas fatales, a pesar de que los rusos tienen vacaciones pagas desde hace seis días precisamente para tratar de bajar la incidencia y la morbilidad.
Este nuevo máximo eleva el total de muertes por Covid-19 a 243.255 en Rusia, que es actualmente el país con más fallecimientos diario a causa de la pandemia.
Moscú, foco de la pandemia, notificó 97 muertes en el último día; seguida de San Petersburgo, con 75, y la región de Moscú, con 52.
El país acumula desde el inicio de la pandemia 8.673.860 contagios, lo que lo ubica en el quinto lugar por detrás de Estados Unidos, India, Brasil y el Reino Unido.
Vladimir Putin, presidente de Rusia. Foto AP
Las autoridades rusas atribuyen el fuerte aumento de nuevos contagios y de muertes a la agresividad de la variante delta, la falta del cumplimiento estricto de las reglas sanitarias por parte de muchos rusos y, sobre todo, a la baja tasa de vacunación en el país.
Hasta el momento, en la nación que fue pionera a la hora de registrar su propia vacuna contra el virus, solo 50.960.796 ciudadanos han recibido el esquema completo de vacunación, lo que sitúa la inmunidad colectiva en el 46,8 por ciento.
El récord de Alemania
Las autoridades sanitarias alemanas verificaron 33.949 contagios en las últimas 24 horas, el máximo diario desde el comienzo de la pandemia.
El anterior se había registrado el pasado 18 de diciembre en plena segunda ola, con 33.777 infecciones, 172 menos que las cifras dadas a conocer este jueves.
Todavía no se ha determinado en qué medida puede haber afectado la festividad de Todos los Santos el 1 de noviembre en este repunte de contagios, que podría deberse a un desfase en la detección y notificación de casos.
La canciller alemana Angela Merkel. Foto AP
Hasta el martes, el 69,5 por ciento de la población de Alemania había sido vacunada. De ellos, el 66,8 por ciento lo hicieron con ambas dosis.
Por su parte, el ministro de Sanidad alemán, Jens Spahn, afirmó este martes, ante el aumento de contagios y la presión hospitalaria, que el país enfrenta actualmente “una pandemia de los no vacunados”, de la que dijo que es “masiva”.
El presidente del RKI, Lothar Wieler, señaló por su parte que el impacto de la cuarta ola es el que se temía, por el hecho de que la tasa de vacunación sigue siendo insuficiente.
Con información de EFE.