Alemania registra un nuevo pico en el número de muertes por COVID-19. 962 personas con coronavirus han fallecido en un solo día.
Además, más de 5.200 pacientes de Covid-19 reciben actualmente cuidados intensivos, con cifras particularmente altas todavía en el Estado de Sajonia, en el este del país.
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La incidencia en la úlima semana ha bajado ligeramente a 195 salvo en Sajonia, donde se mantiene en 414 casos por 100.000 habitantes. Allí el crematorio está desbordado por el aumento de los fallecimientos en diciembre. Han tenido que redoblar turnos y almacenar los cuerpos en el exterior.
De cara a las fiestas navideñas, los virólogos han vuelto a pedir a los ciudadanos que mantengan los contactos personales al mínimo y eviten los viajes prescindibles.
En los condados con tasas de infección más altas, siguen vigentes los toques de queda nocturnos, controlados por la policía. Los bares, restaurantes y centros culturales alemanes permanecen cerrados desde noviembre. Y desde el 16 de diciembre se han endurecido las medidas, solo permitiendo abrir a los comercios esenciales.
