Una mujer ha muerto y otros siete pasajeros han resultado heridos durante un vuelo en EE.UU. tras la rotura de uno de los motores del avión en el que viajaban 149 personas desde Nueva York a Dallas. El accidente -el primero con muertes de un vuelo comercial estadounidense desde 2009– ha obligado al piloto a realizar un aterrizaje de emergencia en el Aeropuerto de Filadelfia.
Después de romperse el motor, una de las piezas reventó una ventanilla y, por esa abertura, resultó succionada hacia afuera del aparato la mujer fallecida, una ejecutiva de banca de 43 años. Otro pasajero estuvo a punto de correr la misma suerte, según han explicado varios testigos y han confirmado las autoridades estadounidenses.
El siniestro se ha producido en un Boeing 737-700 de la compañía estadounidense Southwest Airlines.
Según ha señalado el presidente del Consejo Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB, por sus siglas en inglés), Robert Sumwalt, los primeros datos de la investigación apuntan a que se rompió un aspa del ventilador del motor -una pieza que ha desaparecido- y que en el punto donde estaba sujeta se ha detectado fatiga de los materiales.
Además, Sumwalt ha indicado que parte de la cubierta del ventilador dañado se ha encontrado en la localidad de Bernville, en el estado de Pennsylvania, a más de 110 kilómetros del aeropuerto de Filadelfia donde se produjo el aterrizaje.
Por su parte, el presidente ejecutivo de la aerolínea, Gary Kelly, ha explicado que la última inspección de la aeronave afectada se realizó dos días antes del accidente, el domingo 15 de abril. También ha confirmado que se trata del primer incidente mortal en la historia de la aerolínea, que cuenta ya con 51 años de experiencia.