Stephen Unwin y William McFall fueron acusados de haber violado y quemado viva hasta su muerte a Quyen Ngoc Nguyen en Houghton-le-Spring, Sunderland, Inglaterra.
En el tribunal se conoció, además, que los sospechosos luego de asesinar a la joven madre de 28 años, se tomaron una selfie con el cadáver calcinado de fondo.
Según consigna Daily Mail, los hombres se declararon inocentes y se acusaron mutuamente.
Los primeros informes sostienen que Unwin, de 40 años, y McFall, de 51, atacaron a Nguyen en su casa, donde la violaron y la obligaron a entregar datos de sus tarjetas de crédito.
Una vez cometido el ataque, los acusados metieron a la víctima en su auto Audi A4, y la llevaron a un camino de tierra. Allí la rociaron con gasolina, y la prendieron fuego.
El fiscal Jamie Hill declaró al Newcastle Crown Court: “Se tomaron una selfie en el auto. McFall sostuvo el teléfono y sonreía mientras conducían”.
Durante la audiencia en el tribunal se especuló que la víctima posiblemente estaba viva a la hora de ser quemada.
Las autoridades encontraron, además, varios mensajes entre Unwin y McFall en los que hablaban de Nguyen. Uno de ellos, que correspondía al 9 de agosto, decía: “¿Quieres una vietnamita”.
“Este fue Unwin, sugiriendo u ofreciendo un encuentro sexual con ella”, señaló Hill durante el juicio.
Nguyen, madre de dos hijos, llegó al Reino Unido desde Vietnam en 2010 y se mudó a una casa en Killingworth, North Tyneside.