Los siniestros en circunstancias similares de dos B737 MAX 8 operados por Lion Air y Ethiopian Airlines podrían haberse evitado si hubieran incorporado dispositivos de seguridad que Boeing ofrecía como opcionales. El fabricante estadounidense se dispone ahora a hacerlos estándar al actualizar el sistema de estabilidad del avión, informa el diario The New York Times. Asimismo, va a incorporar instrucciones específicas para los pilotos en los manuales y se modificará su formación.
La investigación sobre qué causó los dos accidentes fatales (con 346 víctimas mortales entre los dos, la totalidad del pasaje y la tripulación) en cinco meses de dos aviones de este tipo al poco de despegar sigue en curso. En el caso de la aeronave de Lion Air siniestrada en octubre de 2018 en Indonesia, las autoridades sospechan que falló un sensor, lo que provocó que se activara el sistema MCAS, que evita que el avión pierda sustento.
El MCAS funciona gracias a un programa informático que utiliza los datos de dos sensores que le indican si debe corregir el grado de inclinación del avión. Si el sistema detecta que las alas no van a generar el sustento necesario, baja de forma automática el morro de la aeronave.