El mundo supera los 6.000 millones de dosis administradas contra la COVID-19, pero su reparto sigue siendo desigual.

Resumen de situación

El cómputo mundial de dosis administradas supera los 6.100 millones de inyecciones, con una media de dosis diarias administradas que ahora se sitúa en torno a los 26 millones, un ritmo a la baja en las últimas semanas, según los datos recogidos por Our World in Data sobre la vacunación en el mundo. Una campaña que avanza en alrededor de 200 territorios y países de todo el planeta, entre ellos, España.

El mundo alcanzó el primer millón de personas vacunadas con al menos una dosis a finales de diciembre de 2020 y pocos días después la cifra ya superaba los 20 millones. Una de cada 100 personas ya había recibido al menos un pinchazo en febrero de 2021, y esta cifra se elevó a una de cada diez en abril. A finales de agosto, un tercio de la población mundial ya contaba con al menos una dosis, pero existe una gran diferencia entre continentes.

La cifra de personas con pauta completa, que en España -como en otros muchos países- sufrió una ralentización debido a los problemas con el suministro en el primer trimestre del año, se refiere a las personas que han recibido las dosis necesarias para completar el ciclo de vacunación. En las vacunas de Pfizer y Moderna, ese ciclo es de dos dosis. Sin embargo, cada vez más estudios apuntan a una efectividad mayor de lo esperada a partir de la primera dosis. Eso, unido a la llegada de vacunas con protocolo monodosis, hará que el porcentaje de población con vacunación completa pueda aumentar a más velocidad.

El siguiente gráfico muestra el ritmo de vacunación en el mundo con el número de dosis diarias y la media semanal.

Datos por continentes

La vacunación está especialmente extendida en la Unión Europea, donde dos tercios de la población ya cuentan con al menos una dosis. En lo que se refiere a la población adulta, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, anticipó a finales de julio que este indicador ya había llegado al 70 %.

Le siguen Latinoamérica, con el 61 %, y América del Norte, con el 57 %, mientras que Asia -que elevó su proporción de vacunados tras una actualización de China a mediados de junio, en la que sumó 622 millones de ciudadanos a su cómputo- tiene a un 51 % de su población con al menos una dosis desde finales de agosto. Mientras tanto, África apenas ha podido vacunar al 6,7 % de su población (según las cifras de los países que aportan datos) y en Oceanía superan el 48 %.

La geografía y la renta dividen el mundo, de modo que el porcentaje mínimo de vacunación entre los países de renta alta -donde se ubican casi todos los europeos- supera al máximo que registran los países de renta baja -casi todos ellos, en el continente africano-. A finales de julio, solo dos dentro del grupo de renta media-baja, Mongolia y Bután, han conseguido vacunar a más de la mitad de su población.

Con los casi de 6.200 millones de dosis que se han administrado, tres de cada cuatro habitantes del planeta podría haber recibido al menos una. Nueve meses de campaña de vacunación después, en muchos países la proporción de población vacunada es cercana a cero.

Han sido numerosas las ocasiones en las que el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom, ha mostrado su sorpresa por “lo poco que se ha hecho” para reducir este desequilibrio. “La brecha entre el número de vacunas administradas en los países ricos y a través del mecanismo COVAX crece cada día“, lamentaba.

Nuestro país notificó el primer envío de donaciones a través del mecanismo COVAX el 26 de julio. Se trataba de un cargamento inicial de más de 750.000 dosis que se repartieron entre Paraguay, Guatemala, Ecuador, Perú y Nicaragua, atendiendo a las necesidades epidemiológicas de cada país. El envío formaba parte del compromiso de donación de 7,5 millones de vacunas a países de América Latina y el Caribe comprometidas por el presidente del Gobierno en la Cumbre Iberoamericana de Andorra.

A mediados de septiembre, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, informó de que España era uno de los países “que más vacunas estamos donando al mundo, el séptimo a nivel mundial y el tercero en la Unión Europea en términos absolutos”. Además, notificó que el total de dosis entregadas al mecanismo COVAX ascendía a los 22,5 millones -una cifra que pasaría a los 30 millones acumulados en el primer trimestre de 2022- y que los fármacos destinados a la región de América Latina y el Caribe se elevaban a los 15 millones. Por otra parte, Sánchez también anunció el envío de una partida de 7,5 millones de vacunas a los países del África Subsahariana y a la vecindad sur de la Unión Europea, “una región que adolece de bajísimas tasas de vacunación”.

¿Cómo se vacuna en cada país?

Desde el principio, Israel se desmarcó del resto de países, tanto en dosis por cada 100 habitantes como en población con la pauta de vacunación completa, algo a lo que han contribuido sus características particulares de población y geografía. En el siguiente gráfico se puede ver cómo evoluciona el ritmo de vacunación en cada país.

Los expertos lo repiten: para terminar con esta pandemia es necesario que la inmunidad frente al virus se extienda ampliamente por todo el mundo. ¿Y cómo conseguirlo? La herramienta en la que la humanidad ha confiado en el pasado para enfrentarse a las enfermedades infecciosas ha sido la vacuna. El desafío ahora es que las distintas inyecciones que se han conseguido desarrollar en menos de un año se administren de manera global.

La vacunación en España

En España, la campaña de vacunación avanza a buen ritmo tras los retrasos y conflictos con las empresas farmacéuticasen la compra anticipada del mes de marzo. Hasta la fecha, la Comisión Europea ha dado luz verde únicamente a cuatro vacunas: la de Pfizer/BioNTech; la de Moderna; la bautizada como Janssen, de Johnson&Johnson; y la de AstraZeneca.

La inoculación de estas dos últimas quedó suspendida de manera preventiva -durante la tercera semana de marzo, en el caso de AstraZeneca, y durante la primera quincena de abril, en el de Janssen- para investigar la vinculación de ambos fármacos con casos de trombosis. No obstante, las dos vacunas han recibido el respaldo de la Agencia Europea del Medicamento (EMA) y AstraZeneca se sigue inoculando en personas de 60 a 69 años en España.