“Bienvenidos al Polo Norte”… Es la broma del momento en el medio oeste de Estados Unidos, que está sufriendo los latigazos de una ola de frío polar sin precedentes inmediatos que podría llevar temperaturas de hasta -53º C a distintos puntos del país.
Cinco estados, desde de Wisconsin hasta el mismísimo Misisipi, en el sur, han declarado el estado emergencia y están dando instrucciones precisas a la población para evitar errores que podrían ser fatales: en Iowa, por ejemplo, se aconseja a la gente que no salga a la calle y que, si lo hace, reduzca las conversaciones al mínimo necesario y evite respirar profundamente. En Chicago se espera más frío que en el Everest y la Antártica.