Witney Carson McAllister, una bailarina profesional de 25 años, de Salt Lake City quien ganó la décima novena temporada de Dancing With the Stars, sabe que a simple vista su piel parece suave, sedosa y sin imperfecciones. “Si ves mi piel, no pensarías que está dañada”, comentó.
Pero como sobreviviente de cáncer de piel, también sabe que las apariencias engañan. Así que a principios de junio viajó a la ciudad de Nueva York a tomarse una fotografía ultravioleta con el fotógrafo parisino Pierre-Louis Ferrer que se especializa en ese tipo de fotos.
Para tomar dichas fotografías, una cámara especial —o una cámara normal con un filtro— capta la luz ultravioleta en vez de la luz visible y expone el daño que hay debajo de la capa externa de la piel. Entonces resultan evidentes los moretones, las manchas provocadas por el sol, las pecas y otros tipos de pigmentación.
El retrato de McAllister no fue favorecedor. Mostró daños alrededor de la nariz, provocados muy probablemente por el sol que se refleja sobre el auto cuando va manejando. “Necesito conseguir unos anteojos de sol más grandes”, comentó. Sin embargo, decidió compartirlo en Instagram con sus más de un millón de seguidores. “Voy a publicar una foto de antes y otra de después”, dijo. “La gente tiene que saber lo que le está sucediendo a nuestro cuerpo”.