El juicio preliminar a los acusados del fraude cometido contra el Estado en la compra de los aviones Súper Tucano cumplió este mes dos años varado, de reenvíos en reenvíos, en el Cuarto Juzgado de la Instrucción del Distrito Nacional, en donde todavía no ha podido lograr superar la fase de los incidentes.

El expediente se encuentra en dicho tribunal desde el 9 de septiembre de 2017 y cada vez que lo conocen lo reenvían en atención a los incidentes que presentan los abogados de los imputados.

La última audiencia se celebró el viernes y se reenvió para el 14 de octubre, luego que uno de los abogados de los imputados alegara que están incompletas las seis cajas de pruebas aportadas por el Ministerio Público.

El caso se encuentra a la espera de una decisión del Cuarto Juzgado de la Instrucción del Distrito Nacional, donde se determinará si se envía a juicio de fondo o se dicta un auto de no ha lugar a favor de los imputados.

En la penúltima audiencia, el 5 de agosto, el tribunal, presidido por la juez Raquel Astacio, ordenó al procurador general y a la directora de Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca) entregar en físico a los imputados las pruebas enviadas desde Brasil por la empresa constructora de las aeronaves.

La decisión del tribunal fue tomada en virtud de que el Ministerio Público no cumplió a tiempo con la disposición emitida por esa corte el 8 de julio, que dispone la entrega a los abogados de los imputados de las pruebas que envió la empresa constructora Embraer.

Al no cumplir a tiempo con la decisión, el Tribunal decidió que el procurador general y la directora de la Pepca, Laura Guerrero Pelletier, cumplan con la ordenanza de la corte.