El Poder Judicial de Irán anunció este martes que ha sido condenado a la pena de muerte un hombre acusado de espiar para la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de Estados Unidos. El condenado, identificado como Amir Rahimour, será ejecutado “pronto”, según informó en rueda de prensa el portavoz del Poder Judicial, Gholamhosein Esmailí.
El portavoz explicó que Rahimour recibió “importantes cantidades de dinero” de EE.UU. a cambio de pasar información sobre el programa nuclear de Irán a la CIA. Esta sentencia a la pena capital es definitiva ya que ha sido confirmada por la Corte Suprema de Irán.
Otras dos personas han sido detenidas recientemente por espionaje
En su comparecencia ante la prensa, Esmailí citó varios ejemplos de la hostilidad de EE.UU. hacia Irán, incluyendo el asesinato a principios del pasado enero del general iraní Qasem Soleimaní. “EE.UU. usa constantemente el espionaje como forma de infligir golpes a Irán”, agregó el portavoz, quien aseguró que la Inteligencia iraní ha descubierto a numerosos espías que trabajaban para ese país y para Israel.
Además, reveló que otros dos iraníes fueron detenidos recientemente y acusados de realizar actividades de espionaje aprovechando sus funciones en organizaciones caritativas. Estas dos personas, que el portavoz no identificó, han sido condenadas en primera instancia a diez años de prisión por espionaje y a otros cinco años por actuar contra la seguridad nacional.
El pasado julio, la Inteligencia iraní anunció que había arrestado a 17 iraníes que trabajaban como espías para la CIA y que algunos de ellos habían sido ya condenados a muerte o a largas penas de cárcel.
La tensión entre Irán y EE.UU. se agudizó recientemente con el asesinato de Soleimaní, pero se mantiene elevada desde que en 2018 Washington se retirara del acuerdo nuclear de 2015 con Irán y volviera a imponer sanciones al país persa.
Irán mantiene entre rejas a numerosos iraníes acusados de espionaje, algunos de ellos con doble nacionalidad, y también a algunos extranjeros, como el veterano de la Armada estadounidense Michael R. White.
El pasado 7 de diciembre, en un movimiento sorprendente, Irán y EE.UU. efectuaron un intercambio de dos prisioneros que llevaban detenidos desde 2016 y 2018 en los respectivos países.
Los liberados fueron el científico iraní Masud Soleimaní, acusado el año pasado en EE.UU. de intentar exportar material biológico a Irán, y el investigador estadounidense Xiyue Wang, arrestado en 2016 en el país persa y condenado por espionaje.