Las restricciones para evitar una propagación del coronavirus en Bangladesh no fueron tenidas en cuenta por las cerca de 100.000 personas que el sábado 18 de abril asistieron al funeral de un líder de un partido islamista, publicaron medios locales.
Maulana Jubayer Ahmed Ansari falleció el viernes pasado a los 59 años, por lo que una multitud participó de su funeral en Brahmanbaria, pese a que las autoridades habían anunciado que iban a respetar el distanciamiento social.
“Algo podría haberse hecho si lo hubiéramos sabido de antemano. Pero ya sucedió”, expresó el ministro del Interior, Asaduzzaman Khan, quien agregó que la ceremonia representó una violación a las normas gubernamentales de distanciamiento. “Vamos a ver qué se puede hacer para evitar tales concentraciones en el futuro”, agregó.
Por su parte, la Policía tampoco estuvo en condiciones de manejar la gran cantidad de personas que se había concentrado, en su mayoría, sin utilizar barbijo ni ningún otro elemento de protección.
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“Les pedimos repetidamente que garantizaran el distanciamiento social. Los anuncios a través de megáfonos se hicieron en la zona con ese fin. A pesar de los esfuerzos totales de nuestra parte, no fue posible mantener las reglas de distanciamiento”, explicó el Superintendente Adicional de Policía, Alamgir Hossain, quien agregó que “la ley no se puede aplicar a decenas de miles de personas”.
El descargo del partido
Frente a la crisis desatada, desde el partido de Ansari aclararon que intentaron “mantener los números al mínimo”. “Entendemos el riesgo. Pero decenas de miles, que amaban [a Ansari] se reunieron”, señalaron.
Bangladesh estableció una cuarentena a nivel nacional el 26 de marzo pasado y fijó en cinco el número máximo de personas que pueden reunirse a rezar en las mezquitas. En tanto, de acuerdo con datos recopilados por la Universidad Johns Hopkins, en el país se han registrado 2.948 contagios de coronavirus y 101 muertos.