Un cargamento de 384 kilos de cocaína fue detectado por las autoridades australianas, en Sídney, oculto dentro del brazo hidráulico de una excavadora. El operativo terminó con la detención de dos personas.

La máquina había llegado procedente de Sudáfrica y, luego de pasarla por los controles de rayos X, miembros de la Fuerza Fronteriza Australiana (ABF, por su sigla en inglés) encontraron en ella centenares de paquetes de un kilo de la droga, que en total está valuada en unos 144 millones de dólares australianos (101 millones de dólares).

Según estimaron, la cocaína iba a ser distribuida en las ciudades de Melbourne y Canberra, así como en las estaciones de esquí de las Montañas Nevadas.