Robert O’Neill, soldado veterano de los Estados Unidos y miembro del grupo de élite de los Navy SEALs que participó de la cacería y muerte del líder de Al Qaeda, Osama Bin Laden, analizó la crisis en Venezuela y el papel de los EEUU.
“Por más que me gustaría ver una salida no violenta, me parece que el final de Maduro va a ser muy sangriento”, afirmó en entrevista con Fox News. El soldado de élite aseguró que “algo tiene que cambiar” pero que no ve ninguna voluntad por parte del chavista. “Mientras baila salsa, el pueblo se está comiendo a sus mascotas”, describió horrorizado.
O’Neill, que dejó el ejército en 2012, describió a Maduro como a “un dictador arrogante” que “ama el poder” y no parece estar dispuesto a darse por vencido, por lo que vaticinó que terminará “secuestrado o ejecutado”.
El ex soldado, de todas formas, afirmó que espera que el gobierno de Trump no decida enviar tropas al territorio venezolano y que funcione una negociación que termine con Maduro asila en el exterior.
Maduro, en el poder desde 2013, se impuso en mayo del año pasado en unas elecciones no reconocidas por buena parte de la comunidad internacional y en las que no participó la oposición. Como resultado de esos comicios, volvió a tomar posesión de su cargo el 10 de enero.
El 23 de ese mes, el jefe del Parlamento, el opositor Juan Guaidó, invocó dos artículos de la Constitución venezolana para reclamar que, como jefe del Parlamento, tiene la autoridad para declararse presidente interino del país al considerar que Maduro, está “usurpando” la Presidencia.
EEUU fue el primer país en reconocer a Guaidó como presidente y, desde entonces, ha tomado diferentes acciones para presionar a Maduro: desde restricciones de visados a funcionarios venezolanos hasta sanciones a la empresa Petróleos de Venezuela (Pdvsa), una de las principales fuentes de divisas para Caracas.
El presidente Trump dijo varias veces que la opción militar “está en la mesa” pero por ahora prepara un nuevo paquete de sanciones para intentar forzar su salida.
“Mejor que se busque una playa para su retiro y no que termine en la playa de Guantánamo”, le advirtió días atrás el asesor de seguridad nacional John Bolton.