Las protestas del independentismo radical inflaman las calles de Barcelona, que anoche vivió las horas más violentas desde que se hicieron públicas las condenas contra los líderes del proceso independentista catalán.
Tras convocar a miles de personas frente frente a la Consejería de Interior, cientos de CDRs se enfrentaron a las fuerzas del orden con una brutalidad desconocida. Además de incendiar numeros vehículos y contenedores de basura, llegaron a arrojar ácido y cócteles molotov a los Mossos d’Esquadra y a la Policía Nacional.
Las protestas se registraron en varias ciudades. En toda la comunidad autónoma, la noche se cerró con casi un centenar de heridos, muchos de ellos agentes, y una treintena de detenidos. Hacía muchos años que no se vivía nada igual en la Ciudad Condal.