SANTO DOMINGO.-Nada está seguro a nivel global. En República Dominicana tampoco. Los fármacos utilizados con éxito en terapias de pacientes con Covid-19 no están validados por la ciencia para la enfermedad, pero funcionan y las naciones no han tenido de otra que utilizarlos.

Anticuerpos monoclonales, retrovirales e inhibidores del sistema inmunitario forman las tres grandes familias de medicamentos con los que los profesionales de la salud, a falta de vacuna, intenta combatir el nuevo coronavirus.

Es el arsenal global y de República Dominicana. El Ministerio de Salud informó que dentro de los principales fármacos utilizados en el país para tratar a pacientes con Covid-19 está la hidroxicloroquina y el tocilizumab.

Del primero la Organización Mundial de la Salud (OMS) acaba de parar las investigaciones tras encontrarse evidencia de que muchos fallecidos por coronavirus habían sido tratados con este medicamento.

La cloroquina, azitromicina, remdesivir e ivermectina también han sido potenciales medicamentos capaces de brindar “alivio” y cura en los pacientes infectados.

¿Qué se sabe de estos?
La cloroquina y la hidroxicloroquina están probados para tratar la malaria y han sido empleados para el tratamiento de enfermedades autoinmunes, como artritis reumatoide.
Estos fármacos que han tenido buenos resultados en varios países, donde se emplea contra el virus.

Los resultados de un estudio que analizó muestras de cerca de 100 mil contagiados con coronavirus fueron divulgados por la publicación científica The Lancet, destacando que el uso de esos medicamentos en pacientes afectados por el brote puede terminar incluso en la muerte.

El informe presentado por los investigadores destaca que no pudieron confirmar los beneficios del tratamiento con estos productos, sino que, además, las pruebas que obtuvieron les permitieron asociarlos a una “disminución de la sobrevivencia” en los hospitales en los que han sido ingresados los enfermos que presentan síntomas más graves. Estos resultados dieron pie a la suspensión temporal de ensayos clínicos en estos medicamentos por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Otros de los medicamentos es el tocilizumab, un inmunosupresor que se utiliza principalmente para tratar la artritis reumatoide y artritis idiopática juvenil sistémica, una forma grave de la enfermedad en los niños.

Este medicamento, con experiencias favorables en China, demostró en un estudio clínico preliminar de la red pública Hospitales de París realizado en 129 pacientes adultos que el tocilizumab previene una reacción inflamatoria exagerada del sistema inmunológico llamada “tormenta de citoquinas”, que afecta entre el 5 por ciento y el 10 por ciento de los pacientes con Covid-19 moderado o grave que no ingresaron en UCI.

La investigación estableció que al grupo se le aplicó dos inyecciones del medicamento, mejoró sustancialmente su estado de salud, con una menor necesidad de respiración artificial y una menor tasa de mortalidad.

Inhibidor del virus

— Estudios
Aunque no existe evidencia en pacientes, un estudio asegura que estos medicamentos, in vitro, puede inhibir la replicación del nuevo coronavirus en 48 horas. Pero la prueba no se realizó dentro de un organismo vivo.

Azitromicina en fase de evaluación
Resultados. La azitromicina es un antibiótico de amplio espectro del grupo de las macrólidos que actúa contra varias bacterias grampositivas y gramnegativas.
También es efectiva contra mycoplasma pneumoniae, treponema pallidum, chlamydia y mycobacterium avium complex.

De acuerdo con resultados de un estudio de investigadores franceses, la azitromicina, como tratamiento de la infección por SARS-CoV-2, era prometedora. Sin embargo, en dicha publicación, se evalúa la eficacia de la terapia combinada de hidroxicloroquina y azitromicina en los enfermos con COVID-19.

Evidencias que, dados los últimos anuncios de la Organización Mundial de la Salud, queda en entredicho su confiabilidad.