Científicos de la Universidad de Surrey, Reino Unido, han descubierto que una dieta moderada con pausas reduce mejor el riesgo de enfermedades cardiovasculares que las dietas diarias basadas en la reducción de calorías.

En un nuevo estudio, publicado por British Journal of Nutrition, han participado personas con sobrepeso que tenían que perder un 5 % de su masa corporal. Los voluntarios fueron divididos en dos grupos. El primero, se alimentaba con normalidad durante cinco días de la semana y durante los otros dos consumían 600 calorías diarias. El segundo grupo seguía una dieta tradicional en la que todos los días tenían que consumir 600 calorías menos que la cantidad necesaria para mantener el peso: aproximadamente unas 1.400 calorías para las mujeres y 1.900 calorías para los hombres.

Los voluntarios del primer grupo lograron perder un 5 % de su masa corporal en 59 días, mientras que el segundo grupo, en 73 días.

Además, tras perder peso, los voluntarios del primer grupo procesaban la grasa de la comida de manera más eficaz que los que seguían la dieta diaria, reduciendo de esta manera un importante factor de riesgo de las enfermedades cardiovasculares.

Asimismo, los científicos también han detectado una mayor reducción en la presión sanguínea sistólica en el primer grupo, lo que potencialmente reduce las incidencias de ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares