Donald Trump dejó un mensaje“muy generoso” y “amable” para su sucesor ayer.
El presidente Joe Biden reveló que al llegar a la Casa Blanca encontró una carta de su predecesor, algo que se ha vuelto una costumbre en el traspaso de poder en Estados Unidos, posiblemente la única tradición que Donald Trump no rompió.La inusual medida que tomó Trump con el Servicio Secreto para todos sus hijos
Biden no compartió el contenido del mensaje, pero no descartó hacerlo en un futuro: “Debido a que era privado, no hablaré de eso hasta que converse con él. Pero fue generoso“, dijo el presidente los periodistas.
En su primera conferencia de prensa, la portavoz presidencial, Jen Psaki, reiteró que la carta fue “generosa y amable” y que solo sería divulgada si así lo consideran Biden y Trump.
Dejar un mensaje en el despacho presidencial es una de varias tradiciones en el traspaso de la presidencia de Estados Unidos.
Y posiblemente la única que no rompió Trump, quien nunca reconoció la victoria del demócrata en las elecciones de noviembre pasado y no estuvo en la investidura de su sucesor, algo que no ocurría desde 1869.
A su llegada al gobierno, Trump encontró un mensaje de Barack Obama: “Felicitaciones por una carrera extraordinaria”.
“Millones de personas han depositado sus esperanzas en usted. Todos nosotros, independientemente del partido, debemos esperar una mayor prosperidad y seguridad durante su mandato”, escribió en la carta en la que también compartió reflexiones sobre su gobierno.
“Nos veremos pronto”
Trump abandonó Washington temprano este miércoles. Él y su esposa se trasladaron a su residencia Mar-a-Lago, en Florida, en su último viaje a bordo del avión presidencial, el Air Force One.
Pero antes, el ahora expresidente dijo a sus seguidores: “Regresaremos de alguna manera. Nos veremos pronto”.
“Le deseo mucha suerte y éxito al nuevo gobierno. Tienen la base para hacer algo realmente espectacular”, afirmó. “Ha sido un honor y un privilegio ser su presidente. Siempre lucharé por ustedes. Estaré mirando, estaré escuchando”.
A pesar de ya haber dejado el cargo, el expresidente enfrenta aún un segundo juicio político en el Senado y sobre su cabeza también pende la amenaza de varias investigaciones judiciales.