El empresario Ángel Rondón Rijo podrá, a partir de hoy, demostrar al juez de la Instrucción Especial de la Suprema Corte de Justicia, Francisco Ortega Polanco, que los recursos que recibió de la Constructora Norberto Odebrecht corresponden a honorarios por sus servicios de enlace comercial y subcontratista y no para sobornar a funcionario dominicanos.
Rondón Rijo, quien según su autobiografía afirma haber iniciado sus negocios en el año 1977, es el principal imputado por los 92 millones de dólares que Odebrecht admitió haber pagado para ser beneficiaria de obras del Estados a través de varios ministerios. Deberá aportar las pruebas con las que desmontará que los desembolsos de más de 92 millones de dólares en intervalos muy cortos fueran destinados a sobornos.
De acuerdo con la acusación del Ministerio Público, Odebrecht certificó que se hicieron transferencias por un monto de 136 millones 507 mil 159 dólares desde sus empresas offshore Klienfeld Services LTD, Constructora Internacional del Sur, Innovation Research Engineering and Development LTD, Fasttracker Global Trading LTD y Trident Inter Trading LTD, a las empresas de Rondón Rijo, quien era su enlace comercial en República Dominicana.
Dichos fondos -según Odebrecht- eran para sobornar a funcionarios públicos por lo que fueron disfrazados en contratos de representación, así como en adquisición de bienes o acciones mediante un circuito de lavado integrado por unas 34 empresas en República Dominicana, Panamá y las Islas Vírgenes Británicas, afirma con la Procuraduría General de la República y las delaciones de ejecutivos de la multinacional en la solicitud de apertura a juicio hecha contra Rondón y otras seis personas.
En el escrito de contestación a la imputación, Ángel Rondón niega que por sus cuentas se hayan hecho desembolsos por 136 millones.
“En realidad, el exponente, conforme se demuestra, recibió de la referida empresa la suma de ochenta y tres millones trescientos diez mil cuatrocientos cuarenta y cinco dólares con 05/100 (US$83,310,445.05), por concepto de pago a sus trabajos, contractualmente demostrado, mismos que ingresaron al sistema financiero nacional, avalado por certificaciones de la Superintendencia de Bancos y la Dirección General de Impuestos Internos”, plantea la defensa del empresario en el escrito de contestación a la acusación.
Rondón Rijo afirma que antes de ser contratado por Odebrecht en el año 2002, ya había obtenido contratos de representación de diversas empresas por unos 17 millones de dólares.
“Yo tenía una vida empresarial antes de Odebrecht. Solamente por conceptos de honorarios de representación antes de Odebrecht, me gané US$17.0 millones de dólares. Esto no incluye mis ingresos y beneficios normales de las empresas que tenía que más adelante detallaré”, dice el empresario en el escrito de defensa.
Siete meses antes de que fuera firmado el contrato de ampliación del Acueducto de la Línea Noroeste, primer proyecto desarrollado por Odebrecht en dominicana, Klienfeld Services LTD transfirió a CONAMSA, empresa de Rondón, un total de US$3,750,000, afirma el Ministerio Público. La multinacional brasileña dijo que el contrato de representación firmado con su enlace comercial fue ficticio.
Además de la afirmación respecto a lo ficticio del contrato antes mencionado, se añade que previo a esa transferencia se reportaron 36 pagos de miles de dólares entre 01/04/2003 y 13/02/2004, a las entidades Librec Investment Limited y ARMA S.A, propiedad del también enlace comercial, según consta en un cuatro que Odebrecht cedió a la Procuraduría. En el expediente se explica que del 2003-2006, el imputado Ángel Rondón Rijo manejaba valores a través de Librec Investment, ARMA, Adeline Group Corp, Roymar y CONAMSA y entre 2006-2014 eran recibidos por medio de las sociedades Lashan Corp y CONAMSA Internacional.