Mientras el Bundestag aprobaba este jueves (28.04.2022) que Alemania apoyaría a Ucrania con armas pesadas, el canciller, Olaf Scholz, estaba en Japón. Alemania albergará la presidencia del G7 el próximo mes de junio, y es obligatorio visitar a los miembros en sus respectivos países. Es decir, el viaje estaba programado desde hace mucho tiempo.

Y, sin embargo, llovieron las críticas en el Bundestag. Se “habría requerido un discurso político estatal”, dijo el parlamentario Johann Wadephul,  de la mayor fracción opositora, que engloba a los partidos Unión Demócrata Cristiana y Unión Social Cristiana (CDU/CSU). El jefe de dicho grupo parlamentario, Friedrich Merz, añadió que “eso es vacilar, eso es dudar, eso es miedo”.

El pacifismo y el SPD

Para entender la forma de actuar de Scholz hay que echar un vistazo al Partido Socialdemócrata (SPD), el partido del canciller, del que son miembros muchos pacifistas, como el jefe de la fracción parlamentaria, Rolf Mützenich, quien opina que solo puede haber seguridad en Europa junto con Rusia, y no contra Rusia.

Mützenich siempre consideró que Alemania debería entablar una buena relación tanto con Rusia como con Estados Unidos. Y, de hecho, se intensificaron los lazos económicos con Moscú. Bajo el mandato del excanciller Gerhard Schröder, por ejemplo, se llegó a un alto grado de dependencia energética de Rusia.

Ahora, debido a la invasión rusa de Ucrania, el SPD tiene que reflexionar sobre su relación con Rusia y evaluar su fuerza militar. Eso no es fácil para nadie en el Gobierno alemán, y Olaf Scholz, que confía en el respaldo de su partido para todas las decisiones políticas que tome, también lo sabe.

Rolf Mützenich, jefe de la fracción parlamentaria del Partido Socialdemócrata alemán (SPD).

Rolf Mützenich, jefe de la fracción parlamentaria del Partido Socialdemócrata alemán (SPD).

El “período de cambio”, un anuncio inesperado

Scholz es pragmático, pero también un estratega. Cuando Rusia invadió Ucrania, el canciller alemán tuvo que actuar con decisión. Sabía que con su declaración de rearmar la Bundeswehr se alejaría del dogma alemán de no suministrar armas a las zonas en crisis y en guerra, y que el “período de cambio” revertiría las convicciones socialdemócratas que rigieron durante décadas.

Muchos del partido Los Verdes también siguen en la tradición del movimiento por la paz, y cuando Olaf Scholz anunció en el Parlamento, el 27 de febrero, un “período de cambio”, huboentre sus miembros muchas caras de sorpresa y perplejidad, así como también en el SPD.

Tanque alemán Gerpard.

La Bundeswehr entregará tanques Gepard a Ucrania.

Problemas para tomar decisiones

Y mientras los pacifisas entre Los Verdes reaccionaron con rapidez ante la nueva situación, el SPD sigue teniendo dificultades para aceptarla. Sobre todo, Mützenich, quien intenta desviar las inminentes decisiones políticas. “No hay respuestas fáciles, tampoco sobre el suministro de armas pesadas a Ucrania. Quien lo vea fácil, actúa con irresponsabilidad”, dijo recientemente.

Pero el canciller alemán también se ha mostrado irritado en las últimas semanas por la presión internacional, sobre todo por las críticas de los partidos de su coalición gubernamental: mientras el SPD frenaba cualquier toma de decisión, Los Verdes y los liberales del FDP exigían más rapidez .

Con la aprobación del Bundestag de este jueves de enviar armas pesada a Ucrania, Scholz puede darse un respiro, porque ahora rige que “de acuerdo a la Carta de las Naciones Unidas, Alemania suministra también armas de defensa a Ucrania y permite el envío de las mismas desde terceros países”.

Pero, ¿qué es defensa y qué es ataque? En las filas del SPD debaten ahora sobre los Gepard, los tanques antiaéreos con los que se trata de proteger el espacio aéreo ucraniano de los ataques rusos. Es decir, los tanques son armas de defensa. Los expertos militares, en cambio, creen que sus cañones pueden usarse también contra objetivos terrestres.

Otra cuestión de relevancia para la Cancillería es hasta dónde puede llegar un país sin que Vladimir Putin lo considere una de las partes activas de la guerra. El presidente ruso ya amenazó con responder “de inmediato”, y con una “guerra relámpago”, y el canciller alemán advirtió sobre una “tercera guerra mundial”. Pero, ¿quién sabe con certeza cómo va a reaccionar Putin y hasta dónde pueden los países ayudar a Ucrania sin que se origine una escalada?

En cualquier caso, la Bundeswehr probablemente solo estaría equipada de forma limitada en este momento. La ministra de Defensa, Christine Lambrecht (SPD), enumeró recientemente que “en el papel” hay 350 vehículos de combate de infantería Puma, pero solo están operativos 150. Y con el helicóptero de combate Tiger, solo nueve de las 51 máquinas podrían despegar.

En vista de problemas tan masivos, ahora se plantean preguntas sobre si 100 mil millones de euros en fondos especiales son realmente suficientes para eliminar los déficits en la Bundeswehr. Pero cualquiera que esté familiarizado con la difícil y prolongada adquisición de material militar sabe que tales cuestiones probablemente solo se agudizarán en unos pocos años.

(rmr/cp)