Como “duros”, con presencia de mucha fiebre, tos e incomodidades físicas, describe Luis Abinader, candidato presidencial por el Partido Revolucionario Moderno (PRM), los primeros días tras ser diagnosticado con COVID-19.
Dijo que al principio se mantuvo con un estado de ánimo muy bajo, en los que se aisló totalmente y sin deseos de hablar con nadie, pero luego fue sintiéndose mucho mejor. Aseguró que esta condición de salud afecta mucho la fortaleza del ser humano, en donde hay que “sacar de abajo”.
“La verdad es que es una enfermedad que te mantiene con mucho malestar. Gracias a Dios algunos síntomas han ido pasando. Mi familia y yo hemos tomado todas las medidas que nos han recomendado los médicos y estamos aquí, casi casi del otro lado”, expresó.
Con respecto a la salud de su esposa, Raquel Arbaje, y sus dos hijas, Esther y Adriana, quienes también fueron diagnosticada con el nuevo coronavirus, comunicó que se encuentran en buen estado.
“Prácticamente el mismo curso médico que han seguido conmigo ha sido el de Raquel, que desde el lunes no ha tenido fiebre, al principio ella tuvo mucho dolor en el cuerpo. En el caso de mis hijas, quienes tienen 23 y 18 años, han estado asintomáticas, tú sabe que a esa edad es muy leve la forma en que la enfermedad ataca”, puntualizó Abinader al ser entrevistado en el programa de televisión El Show del Mediodía, que se transmite por Color Visión, canal 9.
El político opositor mencionó que este viernes fue sometido a unos análisis de sangre y en dos o tres días se realizará nuevamente una prueba de reacción en cadena de la polimerasa o (PCR), para determinar si continúa con la enfermedad.
“Ya he creado los anticuerpos, en este momento, según los médicos, ya yo no contagio a la enfermedad, pero eso no significa que ya pueda estar en las calles, sino que debo seguir con el tratamiento”, precisó.
En cuanto a su proyecto político, afirmó que se mantiene en contacto permanente con su equipo, los que siguen al frente. “Además, he sostenido reuniones de teleconferencia, con doce grupos de jóvenes de diferentes provincias del país y esta noche terminamos todas las provincias”, agregó.
El candidato presidencial agradeció la solidaridad del pueblo dominicano ante su estado. “Me siento muy bien con la solidaridad del pueblo dominicano y de mi equipo. He recibido mensaje de obispos y pastores que han rezado por mí. También me han dedicado misas en varios lugares”, destacó.