Expertos del Centro Cómun de Investigaciones están trabajando para dar respuesta a los nuevos desafíos que se plantean con el Covid 19. También para otros nuevos retos médicos que se puedan plantear en la Unión Europea.
¿Cómo controlar la eficacia de los test que actualmente están siendo utilizados en Europa para diagnosticar el Covid 19 y evitar así la eventual presencia de falsos negativos?
Los científicos del Centro Común de Investigación han desarrollado material de referencia para evitar que un test pueda dar un resultado negativo en una persona infectada por el virus. Este material de referencia está fundamentado en principios de Biología Molecular. Su principal componente es una parte sintética, no infecciosa del virus que ha permanecido estable durante eventuales mutaciones.
Francesco Gatto , biotecnólogo y microbiólogo apunta: “Desde un punto de vista analítico, esta molécula se comporta exactamente como el genoma del coronavirus; pero no es infecciosa, porque no está completa desde un punto de vista biológico”. Gatto, que también es director de salud del Centro Común de Investigación añade: “Esto nos permite utilizar esta molécula en los análisis y garantizar que en todo el proceso analítico, que es bastante complejo, se desarrolle de forma fluida”.
Este material de control básicamente permite a los laboratorios que practican tests y a las compañías que los fabrican comprobar que sus equipos funcionan correctamente y de forma estandarizada en toda Europa.
El principio sobre el que se basan los científicos es sencillo; si los tests no detectan el material de control, tampoco serán capaces de detectar el virus real.
Philippe Corbisier, también es otro de los científicos que trabajan en el Centro Común de Investigación y señala: “Este control positivo nos permite certificar que todo está, efectivamente, bajo control; que el test funciona adecuadamente. Así que si un eventual paciente da un resultado negativo, será porque efectivamente no tiene el virus, y no porque el test no haya funcionado”.
¿Cuáles son los datos epidemiológicos más relevantes para combatir la pandemia?
Como respuesta a la pandemia y desde su comienzo, los científicos del centro trabajaron para recoger y analizar un amplio abanico de datos epidemiológicos, sociales, económicos y medioambientales.
El objetivo era ayudar a los Gobiernos europeos a dar una mejor respuesta a la crisis, coordinada a nivel europeo pero al mismo tiempo adaptada a la situación epidemiológica particular de cada uno de los países de la Unión Europea.
Alessandra Zampieri, es la jefa de la Unidad de Gestión Desastres del Centro Común de Investigación y expone: “Esta información fue por ejemplo utilizada para entender las necesidades ligadas al material médico, respiradores, mascarillas, unidades de cuidados intensivos, cuánto pesonal médico y qué equipamiento serían necesarios en las próximas semanas, etc.” Zampieri añade:_ “En realidad, el problema de acceso a este tipo de datos ha sido muy importante durante la pandemia, Antes fue importante para constatar el pico de casos. Ahora lo es para hacer un seguimiento, ver cómo el contagio se reduce, o para identificar nuevos casos. Acceder a toda esta información es una de las prioridades número 1 de la Unión Europea”._
También evaluan los distintos escenarios de salida en esta crisis del Coronavirus
Tras trabajar en escenarios para estudiar la extensión del virus y el potencial impacto del confinamiento, los científicos estudian ahora lo que llaman “escenarios de salida de crisis” tras el periodo de confinamiento.
Tom de Groeve, es el jefe adjunto de la Unidad de Gestión de Desastres del Centro Común de Investigación y dice: “Los casos están ahora bajo control, pero pueden volver a incrementarse. Así que ahora todo nuestro trabajo de modelización está dirigido hacia cómo esta nueva situación podría desarrollarse durante el verano y cómo podemos equilibrar los intereses económicos del sector turístico y los riesgos de salud pública“.
El análisis de estas estrategias de “salida de crisis” está siendo realizado en cooperación con expertos de otras instituciones, incluido el Centro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades en Suecia.