Dos personas fueron hospitalizadas en Pekín después de contraer la peste neumónica, una variante de la enfermedad altamente infecciosa y con frecuencia mortal, confirmó el miércoles la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Los dos pacientes, procedentes de Mongolia Interior -una región del norte de China-, fueron puestos en cuarentena después de ser diagnosticados con la enfermedad, dijeron las autoridades sanitarias en el distrito de Chaoyang, en el este de la capital china.
Según la OMS, el gobierno está tratando de contener y tratar ambos casos y ha aumentado su vigilancia.
Los humanos generalmente se contagian por la mordedura de pulgas infectadas que viven en pequeños mamíferos como las ratas o al manipular un animal infectado con la enfermedad.
Su tasa de mortalidad puede ser alta, pero el tratamiento con antibióticos es efectivo si se administra dentro de las 24 horas.
Según la OMS, existen tres formas de infección por peste: bubónica -la más común, que afecta a los ganglios linfáticos-, septicémica -ocurre cuando la infección se propaga a través del flujo sanguíneo- y la neumónica -cuando afecta a los pulmones-.
La bubónica, también llamada peste negra, es quizá la más famosa, ya que en la Edad Media fue uno de los brotes más mortales en la historia de la humanidad.
Sin embargo, la neumónica, menos común, es la forma de peste más virulenta. Suele deberse a la diseminación a los pulmones de una infección bubónica avanzada y se transmite generalmente por ratas, aunque también es posible la transmisión de una persona a otra a través de una simple tos.
La peste neumónica no tratada tiene una relación de letalidad cercana al 100%.
Las autoridades de salud chinas dijeron que todas las personas en riesgo de exposición a la enfermedad habían sido localizadas y tratadas, y los hospitales habían intensificado el monitoreo de las personas con síntomas similares.
Agregaron que el riesgo de un brote de peste neumónica en el país es mínimo.
Otros casos
Los brotes en China no son frecuentes, pero gran parte de la ciudad de Yumen, en el noroeste, fue puesta en cuarentena en 2014 después de que un residente de 38 años muriera de peste bubónica.
Las poblaciones de roedores han aumentado en Mongolia Interior después de las sequías persistentes, empeoradas por el cambio climático.
En la vecina Mongolia, dos personas murieron la primavera pasada después de comer marmota cruda, un alimento que puede transportar la bacteria Yersinia pestis.
En Madagascar, un brote de peste en 2017 dejó más de 200 muertos.