Franklin Franco salió del retiro voluntario en que se mantenía luego de 20 años de haber salido de la cárcel y negó categóricamente que haya tenido algún tipo de vínculo con el narcotráfico. Retó a cualquier persona a que demuestre que haya sido condenado por esa situación y aseguró que lo de su prisión fue un “secuestro”. “El proceso mío, yo no lo llamo prisión, yo lo llamo secuestro, porque a prisión va el que comete un hecho, yo nunca cometí un hecho”, expresó.
También se refirió a su hija, Marisol Franco, pareja de César Emilio Peralta (César el Abusador) pendiente de conocérsele medida de coerción por su presunta vinculación a los actos de su pareja, acusada de narcotráfico, y dijo que su único pecado fue haber sido mujer de “ese señor”.
“Yo no sé el por qué a mi hija se la han llevado, yo no vi que en Colombia a la esposa de Pablo Escobar se la llevaron presa, tampoco vi en México que a la esposa del Chapo Guzmán se la llevaron presa. Mi hija no tenía que saber o no saber qué hacia ese señor, si es qué hacia algo. Es simple, el único pecado de ella es haber sido mujer de ese señor, ese es el único pecado que ella ha cometido”, subrayó.
La voz de Franco es de un tono bajo. Se toma su tiempo para hablar y rememorar los hechos.
Franco habló en el programa El Gobierno de la Tarde de la emisora Z 101, al que llamó. Durante la entrevista relató cómo fue apresado en los Estados Unidos, de cuya cárcel se fugó y regresó al país.
“No. A mí me sometieron en los años 80, cuando la ley ni siquiera existía, por lavado de dinero”, contestó cuando uno de los conductores del programa le preguntó ¿Usted fue sometido por narcotráfico?
“Mire, estoy llamando porque he visto últimamente en las redes sociales, en la prensa y en los periódicos exponiéndome a mí como que yo supuestamente era el capo principal de los años 80. Yo sí tuve un caso en los Estados Unidos, estuve preso por un caso de violación a la ley de migración, no por narcotráfico.
De acuerdo a las leyes de los Estados Unidos, yo como primero pintor y con un buen récord de trabajo, tenía doce años trabajando en la misma compañía, nunca tuve problemas allá, jurídicos, ni de ninguna índole, entonces cometí el error de vender una tarjeta de residencia a un federal, me cogieron preso, salí bajo fianza”, acotó.
Agregó: “Porque me tienen en la prensa y en las redes sociales como si yo fuera un narcotraficante, a mí nadie me ha agarrado ni siquiera una semilla de marihuana”.
Los hechos, según Franco
Explicó que cuando se fugó de la prisión de Estados Unidos y regresó a la República Dominicana, un federal, con quien se comunicó por teléfono, y un congresista estadounidense que pernoctaba en el país, de nombre Charles Ranger, se empecinó en que había que extraditarlo a la nación estadounidense y que cuando el caso llegó a oídos del entonces presidente de la República, Joaquín Balaguer (ya fallecido), éste mando a investigarlo. “Investíguenlo, era métanlo preso”, adujo.
También refirió que había un político, del cual se reservó el nombre y quien dijo que ya falleció, que quería sacarlo de “circulación” porque tenía un negocio igual al de él, el cual era muy próspero. Explicó que tenía tres avionetas chárters.
“Entonces me querían sacar de circulación por mi negocio legal que yo tenía y le dio una información a ese congresista norteamericano, diciendo que yo era una persona que tenía muchos problemas en los Estados Unidos y que estaba lavando dinero”, detalló.
“¿Qué pasa? que la embajada Americana, dada la fuente de donde vino la información, de un congresista americano, no investigó suficiente y empezaron a ponerle presión al gobierno, o sea, a Balaguer, entonces me metieron preso con un expediente de qué se yo cuanta páginas sin ningún fundamento, entonces cada vez que yo, desacatado siete veces, yo tuve ocho sentencias de descargo, incluyendo tres de la Suprema Corte de Justicia y me mantenían en prisión”, expresó.
Franco dijo que en esa circunstancias, un hermano suyo, al cual tampoco identificó, tuvo contacto con la embajadora norteamericana en el país Donna Hrinak y luego con su sucesora Linda Watt, hablaron de su caso y expresaron que su país no tenía ningún tipo de problemas con él. En el caso de Donna, relató que cuando ella conoció a su hermano le dijo: “Qué pena que no conocimos a esta familia anteriormente, pero a nosotros nos dieron una información que no era la realidad, pero ya nosotros, imagínese, cómo echar para atrás, pero nosotros no tenemos absolutamente nada en contra de tu hermano”.
“Entonces me fueron a buscar a Najayo, sin ninguna cita ni nada, me llevaron ante un juez y me soltaron (eso fue en el año 1999). Pero yo nunca, a mí nunca, y yo reto a cualquiera a que los llame a ustedes y que diga que a mí me agarraron con droga, que agarraron a alguien que tuviera droga que dijera que fuera mía o algo por el estilo, entonces que llamen a Estados Unidos”, proclamó con la voz un poco más enérgica.
“No, no. Yo hago esto por mi familia, mi familia se siente apenada, se siente …coño… de un caso que fue hace 30 años y me descargaron ocho veces y de las ocho veces me desacataron siete veces, usted cree que un caso de esa naturaleza si yo hubiese tenido algo que ver con lo que decían los jueces me descargan una y otra vez”.
“Oiga, una persona que tiene 20 años que salió de esa situación, de ese abuso, de ese secuestro, que en los últimos 20 años ni siquiera ha tenido una contravención por tránsito y vienen a revivir para hacerle daño a la familia y hacerme daño a mí”, indicó.
Franco no dio una respuesta concreta cuando uno de los conductores le recordó que uno de los expedientes en su contra decía que fue apresado con droga en Puerto Plata en 1988. A esto contestó: “Y dónde estaba la droga. No hay condena, sin delito. Ustedes saben cómo se manejaba la justicia aquí antes y más con Severino (juez Juan María Severino), que era un infierno”.
“Cuando no hallaban ya como mantenerme en prisión le mandaron a pedir al Departamento de Estado, mándenme lo que usted tiene que lo vamos a juzgar aquí. ¿Usted sabe lo que mandaron?, ah, que suponemos que él traficaba con drogas, pero lo único que hay aquí es que se fugó de una cárcel, entonces me juzgaron aquí por la fuga de una cárcel y ya yo el tiempo que tenía preso aquí era más que el tiempo de la condena de aquí, del Código Penal de ese entonces que se le daba a una persona por una fuga, pero de todas formas cualquiera persona que vea todas mis sentencias, todos mis papeles, todas las acusaciones falsas que me hicieron. Nunca existió ninguna droga en ningún expediente”, subrayó.
“Mi familia se siente apenada, se siente …coño… de un caso que fue hace 30 años y me descargaron ocho veces y de las ocho veces me desacataron siete veces, usted cree que un caso de esa naturaleza, si yo hubiese tenido algo que ver con lo que decían, los jueces me descargan una y otra vez”