La tragedia aérea ha dejado un panorama desolador en India. Un avión de Air India Express que venía de Dubai se ha estrellado este viernes en la localidad de Karipur, a 30 kilómetros de Calcuta.

A bordo viajaban 190 personas, entre ellos 10 niños, y siete miembros de la tripulación. El vuelo formaba parte del programa de repatriación Vande Bharat, encargado de facilitar el retorno a la India de sus nacionales varados en el extranjero a causa de la pandemia del coronavirus.

Los voluntarios se desplazaron a la zona para ayudar en las labores de rescate.

“Encontré un niña debajo de una caja en el avión. Cuando la cogí vi que tenía heridas graves en la cabeza. Era una niña pequeña, tendría un año y medio. La trasladé en el coche, si hubiese ido en ambulancia, tal vez podría haberse salvado. Al llegar al hospital había muerto”, cuenta uno de los voluntarios.

El avión, que había intentado aterrizar sin éxito en dos ocasiones, sobrepasó la pista debido a la fuerte lluvia y se precipitó por una pendiente antes de partirse en dos trozos.

El ministro de Aviación Civil, Hardeep Singh Puri, informó en Twitter desde el lugar del siniestro de que la caja negra del avión ha sido recuperada y la Oficina de Investigación de Accidentes Aéreos india está investigando lo sucedido.

El accidente ha dejado 18 fallecidos entre los que se encuentran los dos pilotos y hay más de 15 heridos graves, pero la mayoría de los pasajeros pudieron salir por su propio pie.