Mientras los casos de coronavirus siguen creciendo en España, con más de 85.000 infectados y 7.340 muertos, el Gobierno endurece las medidas de confinamiento y suspende hasta el 9 de abril la actividad de los trabajadores no esenciales.
Los empleados recibirán sus salarios de forma normal y podrán recuperar esas horas no trabajadas de forma gradual hasta el final del año. “Este permiso retribuido recuperable, desde luego, tiene una sola misión: la única misión que tiene el gobierno de España, y que debe ser solidaria con todo nuestro pueblo, es reducir la curva de contagios de enfermedad”, anunció tras el consejo de ministros extraordinario de este domingo la Ministra de Trabajo de España, Yolanda Díaz.
Para afrontar la enorme crisis económica, nueve países europeos han pedido una deuda común y el primer ministro de Italia, Giuseppe Conte, dice que Europa debe mostrar la voluntad de enfrentar el choque social y económico provocado por la pandemia.
“No pasaré a la historia como alguien que no se ha hecho responsable de lo que había que hacer por los ciudadanos europeos. Lucharé hasta la última gota de sudor, hasta agotar toda mi energía, para obtener una respuesta europea fuerte, rigurosa y cohesionada”, asegura Conte.
Alemania ha recibido a pacientes con COVID-19 de las zonas más afectada de Italia y de Francia. Los hospitales están tan desbordados por el número de enfermos que algunos han sido trasladados también a Suiza y a la región de Burdeos.
En Reino Unido, a medida que aumenta el número de muertes diarias, el Gobierno advierte que el encierro podría durar un tiempo “significativo”.
El Ministro Michael Gove dijo que “la gente debería, como dice la carta de hoy del primer ministro, absolutamente subrayar y reconocer, que la situación empeorará antes de mejorar.” Pero parece que el mensaje no ha calado en todo el mundo y los londinenses siguen disfrutando de los espacios públicos.
No así en Portugal, donde se han bloqueado las carreteras para impedir los viajes al sur en el inicio de las vacaciones de Pascua que este año tendrán que ser virtuales.