Casi veinte horas después del naufragio de un barco con turistas surcoreanos en el río Danubio a la altura de Budapest en la noche del miércoles, las autoridades ven disiparse la esperanza de recuperar con vida a 21 desaparecidos.
No obstante, los equipos de rescate continuaban este jueves trabajando a contrarreloj en la difícil búsqueda de los náufragos, tras sacar del agua siete cuerpos muertos y hospitalizar a siete heridos, obstaculizada por las malas condiciones meteorológicas.
“A las 21.15 (19.15 GMT del miércoles) llegó la información de que dos barcos chocaron y varias personas cayeron al agua”, explicó hoy el oficial de policía Adrián Pál en una rueda de prensa en Budapest.
En una filmación grabada por una cámara de seguridad y mostrada a la prensa este jueves, se ve el choque de los dos barcos, que se produce cuando el “Hableány” navega hacia el norte y, al llegar al puente Margarita, cerca del emblemático edificio del Parlamento, le alcanza el “Viking”.
El “Hableány” hace entonces una maniobra, de la que hasta el momento se desconocen las causas que la motivaron, que lo deja justo delante de la embarcación mayor y, tras ser embestido por ésta, se vuelca y se hunde en siete segundos.
De momento, se desconocen las causas del siniestro, sobre las que se ha abierto una investigación, mientras que las autoridades han presentado una denuncia contra desconocidos “por causar accidente masivo y letal”, añadió el coronel.