El Popocatepetl ha vuelto a rugir. El gran volcán mexicano protagonizó este jueves una impresionante explosión, lanzando ceniza y gases volcánicos a una altura de tres kilómetros. Las piedras incandescentes han llovido en un perímetro de más de un kilómetro y medio alrededor del cráter.
Las autoridades, que mantienen la alerta amarilla, han pedido a la población que se mantenga alejada y tome toda serie de precauciones para evitar los efectos de las cenizas y los gases tóxicos.
También les piden que estén listos para una eventual evacuación si las condiciones empeoran.